Esta semana, el Comité de Allegados José Ghiardo de la comuna de La Granja, en la Región Metropolitana, se manifestó frente a La Moneda en demanda de una solución habitacional para las 200 familias que conforman la agrupación. En ese sentido, llamaron a las autoridades a utilizar terrenos fiscales para construir las viviendas.
«Ante la crítica situación de allegados y hacinamiento en nuestra población, nos organizamos junto a 200 familias en el Comité de Allegados José Ghiardo, para exigir que los terrenos fiscales que se ubican en el Cordón Industrial de Santa Ana en La Granja, que por años nos ha contaminado, se usen para construir viviendas para nuestros vecinos», afirmaron en una declaración enviada a El Ciudadano.
En ese sentido, desde el Comité señalaron que en su tránsito como organización, que comenzó hace más de 10 años, «hemos recorrido muchos caminos: desde el descubrimiento de la entrega irregular de patentes a estas industrias el año 2012, que decantó en un recurso de ilegalidad presentado en la Corte de Apelaciones de San Miguel, hasta la realización de un estudio medioambiental llevado a cabo por académicos del Departamento de Física de la Universidad de Santiago, que evidenció la presencia de peligrosos químicos en el aire que respiramos en la población».
Por lo anterior, añadieron, «nos congregamos en el Serviu, Minvu y MOP, para exigir la vinculación desde el Serviu con nuestro Comité de Allegados a una porción de los terrenos fiscales que se emplazan en el cordón industrial, terrenos conocidos como MOP-Santa Ana, lo que consideramos como una posibilidad real que el Estado tiene para pagar el abandono con los pobladores del sector, así como de resolver la crítica situación de allegamiento en la comuna».
Finalmente, la agrupación recordó que «somos la continuidad de una lucha histórica de los pobladores del sector por erradicar a las industrias que nos han enfermado por años, y hemos elegido el camino de la lucha porque es el único que nos ha permitido avanzar ante un sistema y un gobierno que solo responde con migajas y esperas eternas para los pobladores».