¿Te ha pasado que estos días de movilizaciones, de mucho ruido, de mucha información, de desorden de tus hábitos, te han sentido afligido o abiertamente agotado?
Lo que ha sucedido con este despertar ciudadano en donde se ha puesto en jaque a la clase política, ha resultado en una necesaria revisión de cómo se están haciendo las cosas en nuestro país, abriendo un camino para pensar en un Chile más justo y más digno, sin embargo, esta crispación social tiene sus costos, desde la población violentada por la fuerza policial que reprime en las calles, los agobiantes toques de queda hasta esa sensación de estrés y fragilidad que nos afecta en la intimidad.
Insomnio, crisis de angustia o de pánico, irritabilidad, son algunos de los síntomas que muchas y muchos han experimentado por estos días. Lo cierto es que este estado es extraño en nuestra experiencia habitual y por eso conversamos con un especialista, el psicólogo Diego Romero, para guiarnos en esta crisis o en las posibles que sucedan en esta ciudadanía movilizada.
Lo primero importante que señala Romero es que hay que tratar de ser conscientes de las emociones que subyacen nuestro estado actual; reconocerlas, abrazarlas y no castigarlas. “¿Por qué no castigarlas? Pues porque son genuinas y esperables dentro del contexto que vivimos como país. Haciendo esto, somos responsables de nuestro sentir y del autocuidado en general. Muy bien lo decía Claudio Naranjo:
“Ser responsable conlleva estar presente, estar aquí. Y estar verdaderamente presente, es estar consciente. A su vez, estar consciente es una condición incompatible con la ilusión de irresponsabilidad por medio de la cual evitamos vivir nuestras vidas”».
Tras esta reflexión, el profesional entonces propone la pregunta: ¿de qué manera abordamos la angustia y estrés que pudiéramos sentir?
El psicólogo propone una serie de prácticas que debiésemos tratar de incorporarlas a nuestros domésticos:
1. Tenemos que intentar mantener lo más posible rutinas diarias porque estas nos benefician tanto a niños como adultos.
2. Buscar un lugar que te genere o transmita la mayor seguridad posible.
3. Acompañarte de tus cercanos o mantener contacto con quienes están a distancia.
4. Dado el sensacionalismo imperante, cuida las fuentes por las cuales recibes información y evita la sobrexposición tuya y de tu familia.
5. Buscar entornos naturales o abiertos permitirá evitar la sensación de inmovilización o represión.
6. Hidratarse y alimentarse de manera correcta permitirá mantener el cerebro en buenas condiciones y por lo tanto, su capacidad de tomar decisiones no se verá mellada.
7. Infórmate y conoce sobre Derechos Humanos y Ciudadanos en situaciones de emergencia.
8. Busca apoyo y participa en agrupaciones de tu sector pues la sensación de soledad podría sentirse más presente en estos tiempos.
9. Finalmente si sientes un miedo extremo, irritabilidad, conductas violentas y has vivido situaciones traumáticas derivadas de violencia en el pasado, busca ayuda profesional ya sea de forma particular, pública y/o gratuita.
Luego de una hermosa y exitosa convocatoria desarrollada ayer titulada como “La marcha más grande de la historia de Chile” que convocó solo en la Región Metropolitana a más de 1 millón de personas, aún nada indica que las decisiones del Gobierno sean las correctas y las que exige el conjunto social, por lo tanto, las recomendaciones propuestas por este profesional siguen siendo necesarias para este y para los tiempos se avecinan.