La Corte de Apelaciones de Santiago rechazó un recurso de nulidad presentado en favor del Banco de Crédito e Inversiones (BCI) y confirmó la sentencia que condenó a la entidad a pagar una multa de 100 UTM ($4.636.800) por diversas prácticas antisindicales.
En fallo unánime, la Décima Sala del tribunal de alzada confirmó la sentencia que acogiera la denuncia presentada por la Dirección del Trabajo en contra de la entidad bancaria, por incurrir en actos que «atentan contra la libertad sindical de los trabajadores».
Según el fallo, estas malas prácticas de BCI se tradujeron en «hechos como haber intervenido directamente ante los trabajadores, llamando la atención respecto de los aspectos negativos de la participación sindical, fijando al respecto una política de empresa, transmitida a los trabajadores por intermedio de sus jefaturas directas, a quienes se capacitó en este sentido para que se relacionaran con los trabajadores, destacando los riesgos de la participación en un proceso de negociación colectiva, discriminando por razón de afiliación sindical en la aplicación de la política de beneficios de la empresa».
La sentencia también hace referencia a un alto número de supuestas renuncias ocurridas en las institución, señalando que «escapa a toda norma, ya que las 140 renuncias conforman un 20% de los socios del sindicato, los que renuncian entre marzo y mayo de 2016, circunstancia que escapa al recambio y movimiento normal dentro de una organización».
De quién estamos hablando
Cabe recordar que el Banco de Créditos e Inversiones (BCI) pertenece a la familia Yarur, quienes a su vez son parte de la propiedad de Salcobrand. Esta empresa ha pasado por distintas manos del clan, involucrando luchas judiciales en las que han desfilado los abogados más caros de Chile. El BCI es conocido, además, por su importante liquidez. En 2016, tras la compra del estadounidense Citi National Bank, el banco Yarur se consolidó como la institución con más cuentas corrientes del mercado en el país.
En el contexto de esta condena contra BCI resulta interesante revisar la sección de sustentabilidad del banco que se destaca en la web institucional y que queda en cuestión luego de este fallo de la Corte de Apelaciones de Santiago.
«BCI promueve el bienestar económico, profesional, moral y espiritual de las personas relacionadas con su actividad. Para ello, estas variables son consideradas en sus políticas y acciones, con el fin de cumplir con su misión de convertirse en «líderes regionales en innovación, cercanía y experiencia de clientes, y ser reconocidos como la mejor empresa para trabajar y desarrollarse»», se puede leer en el apartado Modelo de Sustentabilidad.