Un trabajo de investigación publicado por El Desconcierto refiere que «para los medios y la clase política las vidas mapuche importan poco o nada, como cualquier cuerpo, territorio o comunidad disidente. Bastan un par de panfletos para inculpar a toda una comunidad».
«Se normaliza que las autoridades difundan noticias falsas y elaboren montajes en su contra, sin reparación posterior», agrega el texto.
La publicación critica que «muy por debajo de la mesa pasa desapercibida la importancia de la incautación de armas, municiones y chalecos de la Armada, posiblemente relacionados con atentados en la Araucanía. ¿Por qué solo un canal reporta el hecho? ¿Cuándo se visibilizará a los responsables de los asesinatos de Macarena Valdés o Alejandro Treuquil? «.
Noticias falsas
El medio reitera que «los mapuche son los sospechosos de siempre y culpables aunque se demuestre lo contrario» y cita que, «la semana pasada, el diputado de Renovación Nacional, Cristóbal Urruticoechea difundió un fake tweet sobre un carabinero herido por una trampa vietnamita atribuida a la Coordinadora Arauco Malleco (CAM) y exhortó al presidente a reprimir con más fuerza la violencia. Al ser desmentido el hecho bajó la publicación y cambió la foto. No hubo disculpas ni repercusiones mediáticas o legales«.
Asimismo, destaca que «son numerosos los casos documentados de falsa imputación a mapuches, aunque los atentados contra camiones por delincuentes comunes ocurran en todo el país. En 2015 se comprobó que empresarios quemaron su camión para cobrar un seguro de quince millones».
Silencio rotundo y cobertura mediática
Sobre la cobertura periodística indica que «TVN es el único canal que reportó dos operativos policiales en la Araucanía en los que se incautó armamento (…) Las autoridades no informaron la identidad de los detenidos y la prensa no investigó. Tampoco fue noticia prime el otro operativo ocurrido en Carahue donde se detuvo a siete individuos armados (…) No hubo análisis dominicales ni locutores de radio gremial que advirtieran al presidente del peligro o acusaran de terrorismo y violencia rural a los involucrados».
En cuanto al concepto de terrorismo el trabajo destaca que «no se aplica de forma igualitaria en las noticias. Los asesinatos de Macarena Valdés activista de la comunidad mapuche Newen de Tranquil y Alejandro Treuquil están fuera de pauta».
En el artículo se afirma que en el caso de la activista «se han retenido carpetas de evidencia, así como en el caso Luchsinger se formateó la computadora que conservaba un testimonio importante para la defensa, así como se destruyó la memoria de la cámara en el caso Catrillanca» y los medios no ahondaron más sobre el tema.
«La televisión insiste en normalizar que los mapuche mueran colgados o de un balazo en la cabeza sin que sea considerado terrorismo«, agrega.
Al día de hoy, cuando se cumplen 106 días de la huelga de hambre iniciada por el machi Celestino Cordóva, se continúa invisibilizando el humanismo de la lucha mapuche y «el machi y el antiguo Wallmapu -territorio mapuche- agonizan y a la televisión no le significa nada«, aseguran en el texto.
Fuentes: El Desconcierto/El Mostrador.