Desde hace unos pocos años atrás, nuestro país ha recibido una gran cantidad de personas de distintas nacionalidades que buscan mejores condiciones de vida. Haitianos, venezolanos y colombianos han ido incrementando su participación en los índices laborales en Chile, lo que refleja la gran cantidad, comparada con años anteriores, de personas que ven a nuestro país como una mejora de vida.
Pero con este gran ingreso de personas, también se provoca, lamentablemente, el aumento de acciones ilegales, aprovechando que la gran mayoría de los inmigrantes aceptan cualquier tipo de «contrato» con tal de asegurar su presencia en nuestras tierras.
La Policía de Investigaciones indagó en las situaciones irregulares y llegó a una preocupante cifra: los delitos asociados a la trata de personas se han triplicado en los últimos 5 años. En 2013 existían 56 casos de este tipo, pero en 2017 se incrementaron a 183.
Según confirma la ley 20.507, que es la que tipifica este tipo de delitos, la transgresiones son: tráfico de migrantes, trata de personas para explotación sexual y para trabajos forzados, como también de menores de 18 años.
Como consigna el portal Economía y Negocios, «en dicho lapso se registraron 606 faltas a la ley asociadas a trata de personas, con un alza de 465% en los casos de tráfico de migrantes, que de 20 casos en 2013 pasaron a 113 el año pasado. En tanto, las investigaciones por ilícitos vinculados a trata de personas, en sus diferentes tipos, registraron un alza de 94%, al pasar de 36 casos a 70».
De acuerdo a este informe, la Región Metropolitana es la zona que lidera el registro de estos delitos, con 277 casos entre este período. Luego siguen Tarapacá, con 188, y Arica y Parinacota con 38.