Candidata a concejala de Demócratas fue denunciada por estafar y amenazar a madres de niños TEA

Un grupo de madres de niños con trastorno del espectro autista denunciaron una grave estafa por parte de una candidata a concejala por la comuna de Pudahuel.

Se trata de María Olga Molina Neira, candidata de Demócratas y presidenta de la Fundación TEAmamos, la cual supuestamente ofrecía terapias para niños con trastornos del espectro autista.

Según reveló un reportaje de Chilevisión, la fundación cobraba una mensualidad de 15 mil pesos a las madres a cambio de terapias que serían realizadas una vez que se reuniera el dinero suficiente para contratar a especialistas.

Además de la mensualidad, la fundación realizaba numerosas actividades para recaudar fondos, como rifas, bingos y zumbatones. En dichas instancias, eran las propias madres las que colaboraban con alimentos y premios para aumentar la recaudación.

«Ella me dijo que teníamos que pagar una rifa de $10 mil y donar premios para juntar fondos para la fundación. Más o menos en agosto (2023) se empieza a solicitar una mensualidad de $15 mil a las familias para los pagos de las terapias. Ella supuestamente estaba buscando profesionales, pero pidió el pago adelantado para poder tener la plata cuando los profesionales llegaran», contó una de las afectadas por el fraude.

«También hizo cobros de credenciales que ella decía que íbamos a usar para salir y hacer actividades. Hizo cobros de poleras también, poleras que jamás se realizaron y jamás se entregaron», cuenta otra de las mujeres.

La fundación se va de vacaciones

En diciembre, casi seis meses después de que la fundación iniciara sus actividades, las madres que habían desembolsado más dinero fueron citadas a una reunión con un terapeuta ocupacional. Sin embargo, éste cuenta que solo se le pagó para un par de sesiones. Unas semanas más tarde, la fundación anunció que se tomaría vacaciones.

«De ahí en adelante no recibí ningún sueldo más (…) Quedamos todos en el aire. Quedé yo en el aire y quedaron las mamás en el aire», cuenta el profesional.

Fue entonces cuando las madres comenzaron a desconfiar de Molina. Las sospechas se acrecentaron cuando se dieron cuenta de que la mujer no había hecho rendición de cuentas de todo el dinero que desembolsaron durante ocho meses.

Las mujeres denunciaron que, tras confrontar a Molina por la no entrega de los servicios prometidos, solo recibieron amenazas por parte de ella y su pareja.

«Les voy a dar dos semanas para que sigan subiendo fotos, que me sigan funando, pero después van a llorar lágrimas de sangre», se escucha en uno de los audios.

«Esas que están ahí haciéndome funas y haciendo todo lo que están haciendo aprovechen el minuto de fama, porque después no les van a quedar siquiera ganas de mirar a la calle», dice otro mensaje.