La deuda que mantiene el Servicio Nacional de Menores (Sename) con sus organismos colaboradores se duplicó en los últimos siete meses, alcanzando los 10 mil millones de pesos.
El monto corresponde al pago que debe hacer el Gobierno a las entidades privadas cuando los tribunales de familia, bajo el artículo 80 bis de la Ley 19.968 -que creó esos organismos judiciales-, obligan a las instituciones a abrir vacantes o a prestar atenciones ambulatorias en casos de falta de cupos.
Según consignó La Tercera, la directora nacional del Sename, Susana Tonda, apuntó que «puede que la deuda supere los 10 mil millones de pesos» y aseguró que, incluso, «siendo el gasto mensual por 80 bis de aproximadamente 3.500 millones de pesos, no me extraña que en el verano se hayan sumado un par de meses adicionales de deuda».
De acuerdo al matutino, la deuda era de un aproximado de 5 mil millones a agosto de 2018. Pero, en el servicio precisaron que del total adeudado hoy, 1.300 millones se arrastran de atenciones prestadas por los organismos colaboradores entre 2013 y 2017.
Asimismo, el Sename detalló que en 2018 se atendieron a 45.774 menores bajo la obligación del artículo 80 bis, de los cuales 1.030 ingresaron a residencias y los restantes 44.744 fueron atendidos en diagnóstico y programas ambulatorios.
José Pedro Silva, presidente de Ciudad del Niño, detalló que nunca se había llegado a este nivel de deuda, producto de que «la necesidad de atender niños es inmensa y porque el Estado no está pagando». En ese sentido, alertó que mientras se mantiene la deuda «las instituciones están resolviendo el tema con recursos propios» y eso las está llevando a un «colapso financiero».