El peligro que acecha al Humedal Ojos de Mar por proyecto de megapuerto y la posibilidad de salvarlo con una Consulta Ciudadana

Continúa la crisis socioambiental en San Antonio por causa del megaproyecto de Puerto Exterior de la comuna, el cual comprometería al humedal urbano Llolleo -Ojos de Mar y la conocida playa de Llolleo. Los defensores de esta localidad de la región de Valparaíso llevan más de dos años buscando proteger este ecosistema de las construcciones aledañas, declarando la zona como humedal urbano.

La estrategia del movimiento ambiental Ojos de Mar, en conjunto con la ONG Vida, ha consistido en promover un proceso legal para establecer el reglamento de Humedales Urbanos.

Pablo Donoso, abogado representante de la comunidad en defensa de las tres lagunas, recordó que La ley de humedales urbanos entró en vigor en enero del año pasado, pero para poder aplicarla y empezar a abrir los expedientes de declaración, se requiere el reglamento.

“Este reglamento fue enviado por el Ministerio del Medio Ambiente, a la Contraloría y la Contraloría le hizo algunas observaciones e igualmente relacionadas con él ordenamiento territorial y finalmente, por el apuro que existía de sacar el reglamento de la Ley de Humedales, la Contraloría tomó razón, pero con algunas observaciones”, explicó a El Ciudadano.

A pesar de esto, cuatro meses después, específicamente el 8 de mayo de 2020 la Empresa Portuaria San Antonio (EPSA), ingresó a evaluación ambiental del proyecto para construir el megapuerto. Lo que significa que no se tuvo en consideración el reglamento en vigencia para proteger el ecosistema en el que se construiría.

Donoso indicó que el nuevo reglamento fue apoyado por la municipalidad de San Antonio, pero que hasta el momento, los compromisos de presentar el expediente que impida la construcción no han sido cumplidos.

“El municipio se comprometió a hacerlo en el mes de diciembre y todavía no lo hace», dijo.

Periodo de consulta ciudadana

Desde que el proyecto portuario pasó a evaluación ambiental, la comunidad ha trabajado pensando principalmente en la etapa de participación ciudadana, que se suspendió por el tema de la pandemia y se reabrió en noviembre.

Donoso indicó que el proceso de consulta ciudadana tendrá vigencia hasta el jueves 28 de enero. A la fecha, decenas de observaciones han presentado los organismos públicos al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) que tramita el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del Puerto Exterior San Antonio.

El proyecto según informaron sus representantes, ingresó el 30 de abril del año pasado a trámite ambiental luego de haber finalizado el proceso de participación ciudadana anticipada.

El proyecto de gran envergadura constará de una etapa de construcción de 10 años, y afectará las lagunillas de la zona y la desembocadura del Humedal Río Maipo, con la construcción de un murallón rompeolas en la ribera norte de la playa de Llolleo, así como actividades de dragados y rellenos de explanada en el área portuaria, la ampliación de tramos de la línea ferroviaria y la explotación de canteras para obtener material de construcción.

Ley de Humedales urbanos: esperanza para estas zonas depredadas

El abogado medioambiental se refirió a cómo la Ley Humedales Urbanos podría permitir que zonas como el Humedal de Llolleo, sean declarados espacios ecológicos en zonas urbanas

Señaló que esta ley dará una protección oficial a la zona y también emplazaría a los proyectos que deben ingresar al sistema de impacto ambiental, “si va a generar algún impacto en uno de estos humedales. Tienen que hacerlo a través de un estudio de impacto ambiental más profundo que el actual y establecer medidas de compensación, mitigación, reparación, etcétera», acotó.

Una situación similar ocurrió en la desembocadura del Río Maipo, ya que este lugar fue declarado santuario de la naturaleza. Sin embargo, a pesar de que estos dos espacios son parte de un mismo ecosistema, no se consideró a los Ojos de Mar como parte de este santuario.

“Las lagunas ojos de mar, los acuíferos se recargan de aguas del río Maipo, del Estero el Sauce y de la playa”, enfatizó el abogado Pablo Donoso.

“Sin embargo, nosotros no estamos haciendo un trabajo para que se extienda el polígono del santuario de la naturaleza, sino que estamos haciendo un trabajo para que se declare como humedal urbano y además, obviamente haciendo todo lo posible para que modifique el proyecto de Puerto Exterior y respete tanto la playa de Llolleo como los humedales”, sentenció.

A pesar de que el proyecto portuario no ha podido avanzar, la comunidad hace un llamado público a participar de la consulta ciudadana para que personas de toda naturaleza y de todo el territorio nacional presenten sus observaciones al proyecto. La consulta termina este jueves, por lo que estas últimas horas son cruciales para que sea masiva y se pueda detener el proyecto.

Enlace para participar en la consulta.