El pasado 11 de marzo, se informó del fallecimiento del reconocido empresario dueño de Cencosud, Horst Paulmann a los 89 años. La noticia fue informada por su familia, quienes afirmaron que el empresario murió en Alemania sin complicaciones. Tras conocerse el deceso, varias autoridades y rostros del mundo empresarial como compartieron su condolencias a la familia.
Entre reconocimientos y halagos, poco se ha hablado de los lazos de Horst Paulmann con algunos altos cargos de la Colonia Dignidad. Según contó a El Ciudadano, el abogado Winfried Hempel, el empresario era un “asiduo visitante de la colonia”. Esto debido a que, Colonia Dignidad fue el principal proveedor de pan del supermercado “Las Brisas”, una de las empresas que adquirió Paulmann, antes de ser dueño de Cencosud.
“Hizo un pingüe negocio porque salían camiones y camiones de la excolonia, al supermercado “Las Brisas”, que producían las esclavas de la panadería en la excolonia y que se facturaba a un precio bajísimo porque, obviamente, no contemplaba la mano de obra”, explicó Hempel.
Según el abogado representante de los excolonos de Colonia Dignidad, Paulmann, sabía que el pan era producido a base de trabajos forzados. También afirmó, que el empresario fue visto muchas veces con el jerarca Gerhard Mücke. Recordemos que Mücke fue uno de los cómplices de Paul Schaefer, en las torturas sexuales dentro de Colonia Dignidad.
“Él sabía perfectamente la condición en la que trabajaban las panaderas. Mujeres y niñas de lunes a lunes, de madrugada, con turnos extenuantes, incluso muchas veces hasta el agotamiento”, agregó el abogado.
También en el 2012 El Mostrador, reveló que Horst Paulmann fue hijo del juez nazi, Karl Werner Paulmann Schoof, quien trabajó en la Oficina para la Raza y la Colonización hasta 1939. Durante ese mismo tiempo, fue ascendido a juez y jefe de la oficina central de los tribunales de la SS y de la Policía en Kassel. Todo esto, gracias a su destacado apoyo al partido nazi.
Tras la derrota de Hitler, la familia Paulmann escapó de Alemania y llegó a Chile en 1950, en donde iniciaron su imperio de supermercados.