El 8° Juzgado de Garantía de Santiago decretó el sobreseimiento definitivo en la investigación por el supuesto centro de torturas que habría existido al interior de la Estación Baquedano del Metro de Santiago, durante el estallido social de octubre pasado.
El fiscal de la Fiscalía Metropolitana Oriente, Álvaro Pérez, explicó que «no solamente no se logró acreditar estos hechos, sino que muy por el contrario, se descartaron. Se lograron desacreditar versiones que daban cuenta de la existencia de amarras y de sangre en el interior del recinto», puntualizó el fiscal, agregando que no se recibieron denuncias de presuntas víctimas.
A su vez, el vocero del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), Carlos Bellei, indicó que «el INDH recibió una denuncia y actuó frente a ella como señala su mandato, recabando antecedentes y señalando en todo momento que es deber del Poder Judicial confirmarla o desestimarla».
Posteriormente, en una declaración pública, desde el Instituto reiteraron que «con los antecedentes disponibles en aquel momento, el INDH decidió no presentar ningún tipo de acción judicial por el caso. Durante los meses que duró la investigación de esta causa, el INDH nunca fue llamado a declarar».
«Si persistieren dudas con respecto al actuar de la institución en este caso, el INDH está disponible, como siempre, para responder consultas y asistir a todas las instancias, sean judiciales o administrativas, en que sea requerido», agregó la declaración.
Recordemos que desde el inicio de la crisis social, el 18 de octubre de 2019, el INDH ha recibido alrededor de 9.800 denuncias y en base a éstas, ha decidido presentar 2.164 querellas.
En ese sentido, desde el INDH señalaron que «así como en el caso del Metro Baquedano, es indispensable que el Ministerio Público y el Poder Judicial se pronuncien oportunamente sobre estos casos, porque solo con verdad, justicia, reparación y garantías de no repetición, se logrará contribuir a sanar las heridas que dejó la crisis social».