Fundación Margen, integrante de la Red de Mujeres Trabajadoras Sexuales de Latinoamérica y el Caribe (Redtrasex), invita a conmemorar el Día Internacional de la Trabajadora Sexual, rechazando la discriminación social y exigiendo políticas públicas de inclusión que resguarden los derechos laborales de las trabajadoras sexuales en Chile.
En Santiago se realizará una Feria Ciudadana en Plaza El Corregidor, ubicada en Santiago Centro, entre las 11 y las 16 horas, contando con la presencia de trabajadoras sexuales agrupadas en Fundación Margen y organizaciones de la Plataforma Social del VIH/SIDA y los Derechos Humanos.
El origen
El Día Internacional de la Trabajadora Sexual nace el 2 de junio de 1975, fecha en el que más de 150 trabajadoras sexuales ocuparon la Iglesia de Saint-Nizier de Lyon, Francia, con el fin de llamar la atención a su situación laboral y social. Después de varios días de huelga, la iglesia fue allanada y las trabajadoras sexuales violentamente agredidas por la policía. En apoyo a la manifestación, el pueblo protegió a las trabajadoras condenando la represión y sumándose a sus demandas por derechos laborales. La situación se fue extendiendo a otras ciudades de Europa, marcando el inicio de una lucha justa y necesaria. En aquella protesta se gestó el Colectivo de Trabajadoras Sexuales, referente histórico para todas las organizaciones de meretrices del mundo. «No tengan miedo: esta liberación no supondrá automáticamente una proliferación del trabajo sexual», dijeron las trabajadoras sexuales aquel histórico día. «Chicas alegres en la casa del señor», tituló la prensa de la época.
Este 2 de junio de 2017 las organizaciones de trabajadoras sexuales de todo el mundo recuerdan a sus compañeras encerradas en una iglesia, valorando su valentía por enfrentarse a la hipocresía social imperante y haciéndose visibles, hablando públicamente de sus problemas y dando fuerza a otras mujeres a hacer lo mismo.
Movimiento en Chile
En Chile, las trabajadoras sexuales organizadas fueron históricamente apoyadas por el ex Vicario de la Pastoral Obrera, monseñor Alfonzo Baeza. «El padre Alfonso fue clave para nuestro colectivo porque nos ayudó a organizarnos y a luchar por nuestros derechos», declara Herminda González de Fundación Margen, institución comunitaria que defiende a las trabajadoras sexuales desde 1998.
El trabajo sexual en Chile no es considerado un delito pero de igual modo es perseguido y estigmatizado, siendo las trabajadoras sexuales objeto de maltrato, abuso y hostigamientos. Del mismo modo, las trabajadoras sexuales viven diversas situaciones de discriminación política, social y cultural. En el último tiempo se ha incrementado la persecución y desinformación respecto del trabajo sexual en ciertas comunas de la Región Metropolitana, mientras los legisladores no se motivan a debatir públicamente sobre la urgente regulación del trabajo sexual en nuestro país.
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