Estudio vincula falta de áreas verdes con un mayor riesgo de sufrir obesidad

De acuerdo con las cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), más del 60% de la población chilena tiene algún grado de exceso de peso -sobrepeso u obesidad-, cifra que se suma a que la prevalencia de población enflaquecida es de 0,8% y la de obesidad es de 23,2% en la población adulta. En el caso de las personas con menos de 8 años de educación esta cifra llega al 33,4%.

En ese contexto, un estudio realizado por la Universidad Bernardo O’Higgins (UBO) determinó que las personas que viven en sectores con menos acceso a parques o plazas son más propensas a sufrir obesidad.

La investigación, que se realizó en las comunas de San Ramón y La Florida, comparó los altos Índices de Masa Corporal (IMC) en hombres y mujeres de edad promedio 24 años, y su relación con los denominados “barrios obesogénicos”, aquellos entornos con menos áreas verdes que desincentivan la práctica de actividad física y la alimentación saludable.

Según explica la directora de la Escuela de Ingeniería en Geomensura y Cartografía de la UBO, Fabiola Barrenechea, “a mayor distancia de las áreas verdes se presentan niveles de IMC más elevados, lo cual se traduce en una población con una fuerte tendencia a padecer enfermedades asociadas a la obesidad como la diabetes y la hipertensión”.

La investigación que profundiza en las características de los barrios obesogénicos, también consideró los puntos de venta de comida chatarra. Por ejemplo, en la comuna de San Ramón se registran 52 de estos locales a 10 minutos de distancia, mientras que la población que presenta un IMC más alto se concentra en los ejes viales de Avenida Ovalle y Departamental.

En la comuna de la Florida, en tanto, los barrios obesogénicos se ubican en el sector poniente, en el eje vial de Américo Vespucio, donde se registran 29 puntos de ventas de comida rápida a 10 minutos de distancia.

Esta es la primera investigación que realizan los profesionales de la Universidad Bernardo O’Higgins, en colaboración con el Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos (INTA). En una siguiente etapa, se contempla incorporar a la totalidad de las comunas de la Región Metropolitana.