Los familiares de los jóvenes chilenos que se encuentran encarcelados en Malasia -Felipe Osiadacz y Fernando Cándia, de 27 y 30 años respectivamente-, acusados de cometer un homicidio, arriesgando incluso morir en la horca, recurrieron al ex presidente Eduardo Frei para que interceda ante la justicia de este país asiático.
Al respecto, el abogado de la familia, Juan Carlos Manríquez, dijo que Frei «se mostró bastante atento y muy conmovido por prestar ayuda eficiente desde el punto de vista de la construcción y condiciones, para que dentro de la justicia de Malasia, y respecto a sus autoridades y procedimientos, se pueda hacer justicia en este caso, estableciendo lo que realmente pasó y luego de aquello fijar condiciones para traer jóvenes a Chile balo los marcos de las normas internacionales, para cumplir el saldo de la pena en Chile con acuerdo de reciprocidad futura».
Recordemos que este caso se dio luego que un hombre interceptara a los jóvenes en el hotel donde se quedaban: «Nuestros hijos no respondieron a estas agresiones y pidieron al recepcionista del lugar en varias oportunidades que llamara a la policía. Como el nivel de agresividad de esta persona aumentó, ellos se asustaron y lo inmovilizaron sin ninguna intención de causarle daño, pues todo lo sucedido fue en defensa propia», reiteraron los familiares.