Una verdadera batalla campal se registró este viernes en plena Plaza de Armas de Santiago, luego de que un grupo de evangélicos agrediera a funcionarios de Carabineros que les solicitaron bajar el volumen de sus parlantes.
El episodio ocurrió cerca de las 19:15 horas, cuando personal policial recibió una denuncia por ruidos molestos y acudió hasta la Plaza de Armas. Allí, miembros del «Ministerio Cristiano Somos padres» se encontraban realizando un evento en defensa «del que está por nacer», el cual no había sido autorizado por la Municipalidad de Santiago.
Según relató el coronel Claudio Pavez, de la Prefectura Santiago Central, los efectivos pidieron a los fieles reducir el volumen de los parlantes. Sin embargo, estos se resistieron y comenzaron a lanzar objetos contra los uniformados. La situación escaló rápidamente y los carabineros terminaron utilizando bastones retráctiles y gas pimienta, pese a que había niños en el lugar.
Finalmente, el enfrentamiento se saldó con la detención de dos personas, un chileno y un extranjero, cuatro carabineros lesionados y dos vehículos policiales dañados.
«Aproximadamente 70 personas se abalanzaron contra los funcionarios. Hubo elementos contundentes lanzados contra ellos (…) No es primera vez que estas personas predican sin permisos. El municipio ya había solicitado presencia policial para evitar ruidos molestos en el casco histórico», relató el coronel Pavez.
Tras el incidente, el alcalde de Santiago, Mario Desbordes, condenó la agresión a Carabineros y recalcó que el evento no había sido autorizado por la Municipalidad.
«Condeno los hechos ocurridos en Plaza de Armas, donde dos carabineros resultaron lesionados tras fiscalizar una actividad denunciada por ruidos molestos (…) He sido categórico en que los espacios son de todos los vecinos, pero para usarlos de manera ordenada y respetuosa«, declaró el edil.