El secretario nacional de la Asociación de Oficiales Profesionales (ANOPRO) de Gendarmería, Leandro Tegler Aguilera, quien dio a conocer en octubre de 2015 el envío de un saludo de Navidad dirigido al jefe máximo de Gendarmería Tulio Arce por parte del ex mandamás de la CNI Álvaro Corbalán, reveló supuestas presiones contra funcionarios de la institución para involucrarlo en la investigación que lleva adelante la Unidad de Alta Complejidad de la Fiscalía Centro Norte por la eventual obtención irregular de títulos universitarios.
El Ministerio Público indaga a cerca de 100 oficiales y vigilantes de Gendarmería presuntamente envueltos en la emisión fraudulenta de certificaciones para lograr títulos y, consiguientemente, un aumento de sus remuneraciones, según explicó a El Ciudadano TV el fiscal adjunto Jaime Retamal.
El persecutor confirmó que la causa se inició a raíz de una denuncia realizada por el Departamento de Investigación y Análisis Penitenciario (DIAP), unidad de inteligencia de Gendarmería que, afirma Leandro Tegler, ha conseguido declaraciones bajo apremios ilegítimos.
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El 19 de noviembre de 2015, ANOPRO puso en conocimiento del director nacional Tulio Arce una denuncia contra personal del DIAP que se desprende del relato de dos funcionarios de Gendarmería. Uno de ellos, el subteniente Diego Rubilar Aguayo, sostiene que recibió amenazas para abrir su cuenta bancaria sin la respectiva orden judicial, mientras que otro, el teniente segundo Rodolfo Niño Alegría, asegura que fue obligado a firmar una declaración sin siquiera leerla, dado “el temor y presión” que le infundieron los investigadores.
Esos antecedentes, subraya Tegler, no fueron derivados por el director al Ministerio Público, lo que constituiría una omisión de la denuncia.
“Tengo la total tranquilidad de que mis representados han actuado apegados a la norma”, dice el abogado Fernando Leal Aravena, ex director jurídico de Gendarmería que defiende a los funcionarios de ANOPRO imputados en la investigación de la Fiscalía.
En conversación con este medio, el jurista criticó las declaraciones vertidas por la ministra de Justicia Javiera Blanco en el diario La Tercera, donde señaló que los oficiales “involucrados” en el caso de supuestas titulaciones irregulares ya estaban suspendidos, refiriéndose así a los capitanes Leandro Tegler y Rodrigo Luna, éste último presidente de la entidad gremial.
Efectivamente, a principios de diciembre, el subdirector operativo de Gendarmería Freddy Larenas Durán ordenó prohibir el ingreso de ambos funcionarios a cualquier unidad penal de la institución mientras no se resuelva la investigación administrativa que se instruye a raíz de la denuncia del DIAP.
“A mí lo que me llama la atención es que habiendo varios funcionarios que habría incurrido eventualmente en esta conducta, y de otras organizaciones gremiales, sean solamente los funcionarios de la ANOPRO quienes son perseguidos, suspendidos y maltratados, dándoles una condena inmediata sin siquiera estar formalizados”, dice Leal.
El abogado de derechos humanos agrega que “uno tiende a creer que acá, más bien, hay persecución a un gremio que precisamente ha sacado al pizarrón, en más de una oportunidad, al director nacional de Gendarmería, por los vínculos que se desprenden de las cartas y tarjetas encontradas al criminal Álvaro Corbalán Castilla”.
Siguiendo esta hipótesis, el gremio habría perdido la simpatía de Tulio Arce cuando en plena paralización de actividades, el año pasado, su vocero mostró a los medios de comunicación una tarjeta navideña enviada por el violador de derechos humanos al director de Gendarmería. “Es bueno conocer la Historia desde las diferentes veredas que la escriben. Tú la has vivido junto a nosotros y en primera fila”, escribió Corbalán al coronel Arce.
El oficial que estuvo a cargo del Penal Cordillera y Punta Peuco durante el gobierno de Ricardo Lagos respondió afirmando que la tarjeta era una práctica usada por Corbalán para “mantenerse vigente” con las autoridades, y que en ningún caso tenía amistad con el reo.
Entrevistado por El Ciudadano TV, el capitán Leandro Tegler controvierte las declaraciones de Tulio Arce, quien fue descrito como el “hijo de un funcionario prestigiado de la institución” en el fallido plan de inteligencia redactado por Corbalán – dado a conocer en 2011 – que planteaba estrategias a Piñera para neutralizar políticamente a Bachelet, siendo apuntado como un sujeto ideal para asesorar al director de la Escuela de Gendarmería en conjunto con otros oficiales afines al ex jefe operativo de la CNI.
Tegler señala que a finales de año, Corbalán, luego de que ser trasladado a la Cárcel de Alta Seguridad, comentó dolido a sus custodios los presuntos vínculos fraternos que mantenía con Tulio Arce, llegando a mencionar que intercedió – supuestamente – para que la esposa del director nacional fuera contratada en el Ejército de Chile como personal civil.
El Ciudadano TV solicitó una entrevista con el director Tulio Arce para que respondiera a estas acusaciones, pero el Departamento de Comunicaciones de Gendarmería informó que “no hay nada que comentar”.
La institución declinó referirse también a la investigación por supuesta falsificación de títulos universitarios señalando que “hay un sumario en curso, el que se encuentra en etapa indagatoria, siendo de carácter reservado mientras no se abra la etapa acusatoria”.
Cabe señalar además que este medio elevó un requerimiento para ingresar a la CAS y entrevistar a Álvaro Corbalán, pero Gendarmería lo rechazó “atendiendo a razones de régimen interno del recinto en el cual se encuentra recluida esa persona”.