Los hechos ocurrieron en la previa de la paralización convocada para el pasado 28 de junio por los trabajadores de los operadores del Transantiago, Alsacia y Express. Apenas horas antes de la movilización que buscaba poner en el tapete la grave crisis económicas de las empresas del transporte público, el dirigente sindical Rodolfo Cid asegura haber sido secuestrado.
El presidente de la Asociación Gremial de los Trabajadores del Transporte y dirigente del Sindicato de Alsacia denunció haber sido apresado por individuos encapuchados que lo mantuvieron amarrado durante dos días, para luego ser abandonado en San Bernardo sin ninguna explicación. Un hecho oscuro que recuerda los tiempos oscuros de la dictadura, cuando los dirigentes sindicales eran secuestrados y desaparecidos sólo por defender sus derechos.
Cid relata que «el día 27 me contacté por teléfono con algunos compañeros para ir a una reunión donde íbamos a coordinar todo el trabajo de la movilización del día 28, y con algunos medios de prensa que me iban a estar esperando en Plaza Italia. Y cuando llegué a la Estación Central, en calle 5 de abril, me abordó un tipo -yo pensé que me iban a robar mi celular- y después otro y me echaron arriba de un auto encapuchado y ahí estuve dos días amarrado a una silla, sin saber dónde estaba. Uno de los que me secuestró sabía mi nombre y nunca me revisó la billetera ni nada».
Según el dirigente, los individuos que lo secuestraron le aclararon que tenían orden de secuestrarlo por dos días y que después de eso lo soltarían sin mayores lesiones. Así, durante 48 horas, permaneció amarrado a una silla y encapuchado, desconociendo su paradero y sin ningún contacto con sus familiares y compañeros.
«Después me dejaron botado en San Bernardo, cuando me encontró Carabineros amarrado con las manos en las espaldas. Como no tenían con qué cortar las amarras, las quemaron con encendedor. Fueron dos días que no se los doy a nadie, yo creo que me voy a morir y me voy a acordar de esto. Es súper complicado pero por suerte estoy aquí», señaló.
El secuestro de un dirigente sindical «en pseudo democracia»
Para Cid y el resto de los dirigentes sindicales de Transantiago es imprescindible que se esclarezca lo sucedido.
«No es normal que un dirigente por pensar diferente y llamar a una movilización para denunciar todo lo que está pasando -la violación de derechos fundamentales que tenemos en nuestras empresas, la colusión de los gobiernos con estas empresas para quebrarlas fraudulentamente y perjudicar siempre al trabajador- sea secuestrado y dejado en libertad después de que pasa lo que iba a ser una movilización«, agrega.
Durante la noche del lunes y sin tener noticias sobre su paradero, los dirigentes del Transantiago decidieron bajar la paralización que se realizaría el día siguiente y enfocarse en la búsqueda de Rodolfo Cid, quien finalmente apareció sin lesiones graves. El paro, por ahora, no tiene nueva fecha hasta que se obtengan pistas de lo ocurrido con el dirigente y piden que el gobierno enfrente el tema «con seriedad» para determinar quiénes fueron los responsables.
Carabineros encontró a Cid pasada la 1 de la madrugada, luego de que éste caminara varios minutos buscando ayuda. Para sus compañeros, el susto y el agravio de haber vivido el secuestro de uno de los suyos no se borrará prontamente. Hace décadas, recalcan, no vivían algo así y lucharán por esclarecer la verdad. «Sería bueno que actuaran como lo hacen con los portonazos que les ocurren a las autoridades. No es sólo Rodolfo, es un dirigente sindical, no es un secuestro cualquiera», sentenciaron.
La familia de Cid ya había interpuesto una denuncia por presunta desgracia que fue apoyada por el senador Alejandro Navarro, pero el caso está siendo guiado hoy por el fiscal Robinson Arraigada. El dirigente mantiene su teléfono intervenido por Carabineros y se encuentra en total reposo, a la espera de alguna respuesta sobre su insólito secuestro. «Se suponía que estas cosas ya no pasaban en esta pseudo democracia, pero pasó», finaliza.