Hace nueve años que las mujeres mapuches que venden sus productos agrícolas en el centro de Temuco vienen luchando por mantener dicha tradición ancestral que se ha transmitido de generación en generación. Sin embargo, la ordenanza municipal impulsada por el alcalde Miguel Becker ha sido implacable con ellas, por lo que continuamente son reprimidas por Fuerzas Especiales de Carabineros.
Por ello, dos asociaciones indígenas que representan a 52 mujeres productoras y emprendedoras, asistieron a la Comisión de DD.HH. de la Cámara de Diputados, a denunciar que son tratadas como delincuentes, y a solicitar el respeto de su cultura y el derecho al trabajo que tienen.
Yolanda Llanquitur, de la asociación Kelludomowen, expresó que están en resistencia, porque se cansaron de seguir escuchando la palabra no: «Queremos una solución y, por eso, llegamos hasta acá, para que tengamos por el Convenio 169 algún derecho que podamos lograr. Estamos cansadas de los maltratos”, remarcó.
Mientras, Rosa Martínez Pichún, de Folil Mapu, indicó esperanos que las/los diputados puedan interceder y tratar de buscar un diálogo: «Se están violando varios derechos humanos acá, donde nosotros somos violentadas con Fuerzas Especiales, con lacrimógenas. Yo creo que eso es injusto porque nosotras somos conservadoras de nuestra cultura y nuestras raíces. Nosotros queremos preservar lo que es nuestra cultura con el mote, la harina tostada y eso debe preservarse en La Araucanía, nosotros somos mujeres esforzadas y luchadoras”, puntualizó.
El abogado asesor de las hortaliceras mapuches, Jaime Madariaga, explicó que optaron por presentar un recurso ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos: “Temuco, entre otras cosas, se fundó ahí porque había trueque, comercio y él (alcalde) pretende con un decreto alcaldicio terminar con esta costumbre ancestral, lo hizo sin cumplir con el Convenio 169, no hubo consulta indígena. Y, la verdad, es que es un acto autoritario que no tiene ningún sentido. Y cuando no se consulta conforme al Convenio 169, existiendo la obligación de hacerlo, se vulnera un derecho humano esencial. Por eso la Comisión Interamericana de DD.HH. debe conocer esta materia”, planteó.
Acuerdos
En la sesión se tomaron varios acuerdos, como sesionar en La Araucanía, según explicó la presidenta de la instancia, diputada Emilia Nuyado (PS), quien valoró también el compromiso de sus colegas parlamentarios y la voluntad para avanzar en una solución.
«Debe haber un pronunciamiento de la Contraloría respecto a si aplica o no aplica el Convenio 169, cuando las ordenanzas de parte de alcaldes y del concejo municipal han trasgredido y vulnerado los derechos de las mujeres, que lo único que solicitan es vender pacíficamente los productos que ellas solas preparan permanentemente en sus territorios», acotó.
Además, la Comisión de DD.HH. acordó citar a Carabineros por la aplicación desmedida de la fuerza policial en el centro de Temuco, incluso con las ñañas o mujeres mapuches de la tercera edad.
Reacciones
Las y los parlamentarios acogieron el llamado de las mujeres mapuches de Temuco, coincidiendo en la necesidad de diálogo y de no considerarlas igual a otros vendedores ambulantes.
“Ellas producen sus verduras y productos propios, los huevos de gallinas colloncas, el mote y la harina tostada y la venden en el centro de Temuco. Sin embargo, ellas han sido tratadas de manera igualitaria al comercio ambulante, han sido sacadas con Fuerzas Especiales y violentadas en sus derechos; aún cuando el Estado de Chile ha suscrito convenios internacionales, donde los derechos ancestrales deben ser defendidos, protegidos y cuidados, particularmente, los de mujeres indígenas”, destacó la diputada por la Araucanía Norte, Andrea Parra (PPD).
Por su parte, el parlamentario por Temuco, Andrés Molina (Evópoli), resaltó que tienen antecedentes claros de que son personas que llevan trabajando en el centro de Temuco muchos años, y por otro lado, que tienen sus propios productos: «Es decir, no son comerciantes. Eso ya está demostrado a través de un estudio que hizo el propio municipio y, por lo tanto, después se puede fiscalizar. De tal manera, que si alguna incumple esa condición, pierde su derecho”, sostuvo.
Asimismo, estimó que hay que avanzar en el diálogo y «no terminar a palos -como se dice en buen chileno- en una situación que claramente no le ayuda a nadie. No es una buena foto para La Araucanía. No es una buena foto para Chile y menos para nuestros pueblos originarios”.
Fuente: Cámara de Diputados