Han transcurrido cinco meses desde el femicidio de Norma Vásquez, cuyo autor resultó ser su ex pareja y subteniente, Gary Valenzuela. El imputado recientemente confesó que intentó ingresar a Carabineros sin éxito dos veces al no pasar las pruebas psicológicas. Sin embargo, lo logró al tercer intento de manera irregular.
Asimismo, anteriormente quiso ingresar a la Policía de Investigaciones (PDI), fallando por el mismo motivo.
Lo anterior despierta las alertas respecto sobre cómo la institución aborda el ingreso de los postulantes, y en especial en el caso de Valenzuela en el que el cuerpo policial tuvo acceso a los antecedentes psicológicos.
El imputado por delito de femicidio, actualmente permanece en prisión preventiva en el Centro de Cumplimiento Penitenciario Cauquenes. Se espera que a principios de marzo, se lleve a cabo la acusación del Ministerio Público.
Ingreso irregular a Carabineros
En los detalles del informe pericial revelados por el Área de Reportajes de BíoBío, Valenzuela entregó antecedentes del femicidio cometido contra Vásquez, a quien de acuerdo con sus declaraciones, asesinó a golpes con un extintor, lo que abre la interrogante sobre los protocolos con los que una institución, ya bastante cuestionada, admite a sus aspirantes.
Valenzuela relató que la primera vez que no quedó realizó los tests de Rorschach, Zulliger y Lüscher.
Carabineros confirmó a BioBioChile que Valenzuela no superó sus dos primeros intentos exitosamente debido a su rendimiento en las pruebas psicológicas.
“Postulé en tres oportunidades en Carabineros y quedé en la tercera. Logré saltar la valla porque había un capitán de Carabineros que estaba a cargo de la situación”, confesó, dando cuenta de su ingreso irregular a la institución.
Asimismo, Valenzuela admitió haber entrado “por pituto”, de acuerdo con lo relatado a profesionales del Instituto Psiquiátrico Dr. José Horwitz Barak.
De acuerdo con información de transparencia entregada en 2015, la prueba psicológica de Carabineros se lleva impartiendo desde 1981. Éstas se basan en pruebas de aptitud mental, normalidad intelectual, grado de estabilidad o equilibrio emocional e impulsivo.
Asimismo, indican que se utilizan metodologías adecuadas e instrumentos actualizados a las necesidades de buscar el perfil adecuado del postulante: una persona capaz de mantener buenas relaciones interpersonales, sin generar dificultades adaptativas con otras personas que componen la institución. Rasgos ideales que contrastan con los informes que revelan el perfil del imputado.
A pesar de que la institución mantiene el documento de la prueba de ingreso en reserva, indican que se realizan cuestionarios, entrevista personal y pruebas proyectivas, tales como las mencionadas por el ex subteniente.
No obstante, dicho protocolo no parece estar cumpliendo con su función mientras se permitan ingresos irregulares como los de Valenzuela que culminaron con el femicidio de una funcionaria de la institución.
Al respecto, Lorena Astudillo, abogada feminista y vocera de la Red Chilena contra la Violencia hacia las Mujeres señaló que Carabineros ha permitido irregularidades en general, dejando «bastante que desear».
«Llegamos a esta situación, por ejemplo de irregularidades para quiénes pueden llegar a ser Carabineros y la responsabilidad, por supuesto que es de la institución, y también de las personas responsables de reclutar a aquellos aspirantes», afirmó en sus declaraciones a El Ciudadano.
El perfil de un femicida
En la entrevista del informe revelado, Valenzuela confesó que podría haber cometido suicidio luego de haber perpetrado el femicidio.
El imputado relató que iba a matarse en su auto, y que de no haber asesinado a la víctima, hubiese matado a más personas. “Después, cuando estaba en enfermería me intenté cortar las venas, pero como me amo tanto es imposible una muerte lenta”, confesó.
“Me amo demasiado. Creo ser un dios terrenal. Yo creo que siempre gano y si alguien me quiere hacer daño nunca pierdo. Soy un dios terrenal porque quiero serlo no más (…) dejémoslo como que me quiero mucho”, aseveró el imputado.
Por otro lado, se revelaron una serie de antecedentes que dieron cuenta de su condición de femicida y agresor en potencia.
“Yo estaba sentado, una compañera me pone un papel en la silla que decía ‘soy weón de nacimiento’. Me sentí mal y dije algún día me voy a vengar. Me dio vergüenza y rabia. En ese momento pensé en vengarme matándola, pero después se me olvidó”, relató Valenzuela.
Además, Carabineros estuvo al tanto de su perfil violento. Valenzuela contaba con una denuncia por parte de una ex pareja, a quien le rompió el celular. Al respecto, el imputado admitió que tuvo suerte, porque el encargado de sancionarlo lo conocía. El hecho simplemente concluyó en un llamado de atención.
De acuerdo con los detalles del informe psicológico revelados en BBCL, a Valenzuela se le diagnosticó trastorno de personalidad narcisista.
Sin embargo, dicho diagnóstico no lo exenta de ser imputado por el femicidio contra Norma Vásquez, puesto que no se consideró como una “enajenación mental”, según el documento.
Para la abogada Astudillo, dicho trastorno narcisista no lo vuelve necesariamente un femicida, lo cual es lo más importante a considerar.
«Él (Valenzuela) es una persona que tiene sus rasgos, pero principalmente y lo que nos tiene que quedar claro, es que él es un femicida. ¿Qué significa eso? que es un hombre machista, que se siente superior a las mujeres y además se siente con el derecho de decidir cuándo, cómo y hasta dónde vive su pareja, y eso es peligroso«, advirtió la abogada feminista,
Asimismo, en el informe concluyeron que «su peligrosidad no se encuentra asociada a una enfermedad mental«, por lo que continúa siendo imputable por el crimen cometido.