Minutos antes de que comenzara la declaración de Ernesto Silva donde informó de su renuncia a la presidencia de la UDI, en el Senado tenía lugar el cambio de mando en la mesa de la testera. La senadora Isabel Allende Bussi terminó su periodo como Presidenta del Senado y con un sentido discurso dejó el lugar al demócrata cristiano Patricio Walker.
Allende Bussi fue la primera mujer Presidenta de la Cámara Alta y ocupó ese mismo lugar, que su padre Salvador Allende ocupó en 1970. En sus palabras de despedida destacó el productivo año legislativo y los proyectos que se aprobaron, Allende señaló que fue “un año especialmente productivo en materia legislativa, donde se celebraron 110 sesiones, despachando 159 proyectos, donde varios de ellos marcarán un antes y un después en la vida nacional». Sin embargo, reconoció que «pese a estos resultados, dejo la presidencia con inquietud y dolor. Los primeros meses de 2015 han remecido a la sociedad chilena, pues hemos conocimos diversos hechos que interpelan a la ética de la sociedad chilena”, dijo, y añadió que “entiendo la indignación ciudadana, con los privilegios, la indebida influencia del dinero, la falta de transparencia y la evasión y elusión de impuestos”. Por eso llamó a “dignificar la política” y a considerar “las diversas iniciativas y mociones parlamentarias para elevar los estándares de la política, el mundo empresarial y ciudadano”.
En tanto, Patricio Walker se convirtió en el presidente del Senado mediante una votación que le confirió dicho cargo con 23 votos a favor .Votación que además, dejó al senador Alejandro Navarro como vicepresidente de la Cámara. Walker señaló que llegó a la presidencia “asumiendo la responsabilidad de ser presidente del Senado en un momento en que la política y las instituciones públicas están expuestas a una creciente desconfianza de la ciudadanía, por lo que debemos reaccionar de manera decidida y proactiva, comenzando por exigir mucho más de nuestra propia forma de construir y hacer política”.
Agregó que “sabemos que los ciudadanos están molestos con la política y tenemos que hacernos cargo de esa realidad. Sin embargo, no debemos olvidar jamás que, sin partidos, gobiernan los caudillos, y sin Parlamento, gobiernan los dictadores” y sostuvo que “el desafío que debemos enfrentar todos es darle a nuestro país una gobernabilidad democrática, en paz, justicia y cohesión social”.
“Los problemas de la política, se enfrentan, con una mejor política. Los problemas de la democracia, los enfrentamos con más y mejor democracia”, afirmó Walker.Por ello señaló que “en los próximos días, voy a proponer a los comités parlamentarios un calendario de trabajo con plazos acotados, para la aprobación de los proyectos de ley sobre probidad y transparencia que se encuentran radicados en las comisiones del Senado. Y estoy seguro que vamos a contar con el apoyo transversal de todos senadores para hacer los cambios legislativos que el país exige y reclama”.