La Municipalidad de La Cisterna informó que aplicará una medida para obligar a las botillerías de la comuna a cerrar dos horas antes del inicio del toque de queda. De acuerdo al alcalde, Santiago Rebolledo, en gran parte, la decisión responde al aumento en un 10% de las denuncias de violencia intrafamiliar, «algunas de las cuales pudiesen estar asociadas al consumo de alcohol».
En entrevista con el canal CNN Chile, el jefe comunal explicó que durante la mañana de este domingo, funcionarios municipales notificaron a todos los comerciantes respecto a esta ordenanza, que fue aprobada de forma unánime por el Concejo Municipal.
En total, son 300 los locales de expendio y venta de alcohol que actualmente funcionan en la comuna, que deberán cumplir con la medida.