La visita del arzobispo de Malta, Charles Scicluna, generaba expectación respecto a los resultados que su investigación sobre el Obispo Barros podría tener. Luego de una primera reunión con Juan Carlos Cruz, víctima de Fernando Karadima, en Nueva York, se reunió en Santiago con James Hamilton y otros afectados por los abusos de párroco de El Bosque, además de organizaciones como los Laicos de Osorno.
Pero durante esta jornada, el enviado especial del Papa Francisco presentó problemas de salud, que lo mantienen hospitalizado en nuestro país por problemas a la vesícula. Es por esta razón que los Laicos de Osorno, no podrán reunirse personalmente con Scicluna.
Pese a ello manifestaron que esto no impedirá la entrega de un dossier, en el cual el movimiento insiste en pedir la renuncia del actual obispo de Osorno.
Mario Vargas, integrante de la agrupación que destacó que el informe de 1.500 páginas, busca describir el ambiente que generó entre la comunidad católica de Osorno, el nombramiento y ratificación de Barros. Esto debido a las acusaciones que señalan al obispo como un encubridor de los abusos de Karadima
Según las palabras de Vargas. “Cuatro sacerdotes se han ido, estudiantes católicos escriben cartas para que no les confirmen, dos pastorales de parroquias le han cerrado las puertas al obispo Barros, hay empleados desafectados por situaciones de abuso de poder, todas estas situaciones las traemos como relato y como evidencia al arzobispo”.
Desde la agrupación esperan que los antecedentes lleguen lo más pronto posible al Papa Francisco, para que la máxima autoridad de la iglesia católica, genere cambios en el obispado de Osorno. De esta manera pretenden devolver la paz a una comunidad convulsa y resolver el quiebre entre la iglesia y su comunidad.
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