Por Gonzalo Soto
El pasado miércoles 03 de Febrero el Tribunal Ambiental de Valdivia rechazó los reclamos realizados por el Municipio de Coronel contra el proyecto Terminal Productos del Pacífico de COPEC, labrando el camino a la empresa (propiedad del grupo Angelini) para su instalación en la comuna considerada por el INDH como Zona de Sacrificio.
Para comprender la situación hay que remontarse al 18 de Noviembre de 2019, cuando la Comisión de Evaluación Ambiental de la región del Bío Bío rechazó en estrecha votación (4 a favor y 5 en contra) el proyecto de COPEC, que de acuerdo a su Declaración de Impacto Ambiental (DIA) considera la construcción de 2 terminales marítimos y 17 estanques para el almacenamiento de 190.000 m3 de combustibles en las costas del sector
norte de Coronel. En aquella jornada donde el municipio coronelino presentó una débil defensa, el rechazo del proyecto se sostuvo en la oposición rotunda de la comunidad animada por campañas informativas desplegadas por las organizaciones ambientales y vecinales que alertaron sobre el impacto ambiental que podrían generar de los terminales
de combustible en el sector, y además, por la crisis política y social que atravesaba el país y que tenía a autoridades e instituciones con un alto descrédito.
Aquella misma tarde, y por medio de un comunicado oficial, COPEC anunciaba su decisión en insistir en la construcción del proyecto, lo que se concretaría 9 meses después, cuando el 21 de Agosto de 2020, Hernán Brücher, Director Ejecutivo del desprestigiado Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), otorgaba la resolución de calificación ambiental
(RCA) al proyecto de COPEC cambiando radicalmente el panorama. Este hecho sorprendió tanto a la comunidad como a las autoridades locales, quienes un mes después presentaron un recurso legal para la anulación de la RCA aprobada a COPEC, y luego otras reclamaciones interpuestas en el Tribunal Ambiental de Valdivia para impedir la instalación
del proyecto.
¿Qué dice el fallo del Tribunal Ambiental de Valdivia?
Por unanimidad el órgano jurisdiccional desechó las reclamaciones de la
Municipalidad de Coronel señalando que estas no proceden: en primer lugar porque el municipio no habría agotado la vía administrativa, y en segundo lugar, el tribunal considera que las municipalidades no están habilitadas para presentar observaciones ciudadanas.
» (…) al no existir proceso PAC ni observaciones ciudadanas durante la evaluación ambiental del Proyecto, la I. Municipalidad de Coronel no cumplió con el trámite esencial que sirve de antecedente a la acción intentada, esto es, el agotamiento previo de la vía administrativa a que alude el art. 17 Nº 6 en relación con el art. 18 Nº 5 de la Ley Nº
20.600”.
“El rol de garante de la participación de la comunidad atribuido a las Municipalidades por la Reclamante, en ningún caso las habilita para presentar observaciones ciudadanas” y determinó que “no existiendo norma legal alguna que habilite a las Municipalidades a presentar observaciones ciudadanas, éstas se encuentran impedidas de hacerlo”.
Las instituciones contra los territorios
Las Zonas de Sacrificio no son una creación espontánea, sino que son producto mismo de este modelo, y en su origen se pueden identificar al menos dos derivas: una ideológica y otra política-administrativa.
En los tiempos del neoliberalismo ha sido una tendencia el debilitamiento de las estructuras del Estado, con excepción de las encargadas de la represión, con el fin de beneficiar los intereses empresariales-extractivistas y mantener el control social, lo que se conoce como “Estado Mínimo”. En política ambiental esto se traduce en una institucionalidad precaria y casi sin financiamiento, por ende con baja capacidad de intervención, porque el objetivo de este modelo no es proteger la naturaleza, sino por el
contrario, devastarla en búsqueda de riquezas.
Por otra parte, el extractivismo y los proyectos contaminantes siempre encuentran aliados en los territorios. Durante las últimas dos décadas ha sido reiterativo que aún en contra de la opinión ciudadana, o sacando ventaja del desconocimiento de esta, las autoridades locales operen a favor de los intereses empresariales, ya sea con argumentos (o falacias) pro empleo, omitiendo los mecanismos de participación ciudadana o con
simples negligencias, se hacen cómplices del extractivismo.
Como afirma el académico uruguayo y director del Centro Latinoaméricano de Ecología Social, Eduardo Gudynas, en América del Sur se ha tejido una íntima relación entre el extractivismo y corrupción, y donde estos elementos están presentes también hay violacion de los derechos humanos.
En Chile, el caso más emblemático es la aprobación de
la llamada “Ley de Pesca” o “Ley Longueira”, donde parlamentarios y parlamentarias recibieron dinero a cambio de proporcionar información y favorecer a las 7 familias que controlan la pesca industrial.
Con las instituciones y sus funcionarios al servicio del empresariado se han
diseminado por los territorios proyectos extractivistas y contaminantes que aprueban la evaluación de impacto ambiental sin importar el deterioro de los ecosistemas y la calidad de vida de las comunidades, dibujando así el mapa de la injusticia ambiental: los territorios en sacrificio.
Memorias del Sacrificio
Los orígenes de Coronel a mediados del siglo XIX están prácticamente ligados a la actividad extractiva del carbón. Por otra parte, la bahía ha sido históricamente eje fundamental para la actividad económica y social de la comuna, donde la expansión de la primera ha disminuido considerablemente el espacio de la segunda.
Así como las fuerzas de la naturaleza lo hicieron por miles de años, la acción humana e industrial ha transformado aceleradamente las costas de la comuna otorgando nuevas funciones; por mucho tiempo ha sido el sustento de pescadores y recolectoras y en paralelo albergó los muelles por donde el carbón extraído debajo de la tierra era exportado a recónditos lugares del mundo. Ha sido balneario, lugar de esparcimiento y reunión de la población, aunque cada vez lo es menos. En las últimas décadas la bahía se ha convertido en un gran polo portuario por el que circula gran cantidad de mercancías y productos forestales, y paradójicamente, ahora ingresa carbón proveniente de otros lugares del mundo con el cual funcionan las centrales termoeléctricas.
El borde costero se ha transformado en un gran cordón industrial, zona de acopio maderero y bodegaje de grandes tiendas del retail que impiden en gran parte del territorio el libre acceso de la comunidad a las playas,
teniendo que dar largos rodeos para llegar a estas.
El neoliberalismo, o capitalismo de guerra como le señalan algunos autores, ha convertido los bienes naturales en una maldición para los territorios que los poseen, más aún si están en las periferias. Pero hoy, ya no solo se depredan grandes superficies para la explotación del agua, la tierra o minerales, sino que espacios que antes parecían no tener valor, como vegas, laderas y litorales, se han vuelto zonas de interés para el capital,
posibles lugares de acopio o espacio para ubicar residencias exclusivas.
Para su reproducción el capitalismo necesita engullir todo el entorno no-capitalista tangible y también intangible; la cultura y las subjetividades, los bienes naturales, recursos genéticos, la sexualidad, espacios comunes y bienes sociales. Es acumulación por despojo, el arrebato de todo con la violencia intrínseca del extractivismo.
El Terminal Productos del Pacífico de COPEC y su unilateral aprobación son un pequeño reflejo de la violencia del despojo. Es la playa, el acceso a los espacios comunes, los derechos vulnerados, la historia del territorio, la sensación de abandono por parte de las instituciones, el constante riesgo y miedo al sacrificio, y donde hay miedo hay menos espacio para la vida.
Sólo hay resistencia.
Por Gonzalo Soto – Activista socioambiental
Referencias.
Extractivismo, Despojo y Crisis Climática. Desafíos para los movimientos sociales y los proyectos emancipatorios de Nuestra América – Seaone, Taddei y Algranati.
Extractivismo y Corrupción en América del Sur – Eduardo Gudynas
Fallo Tribunal Ambiental de Valdivia ante reclamación del Municipio de Coronel https://www.adprensa.cl/cronica/tribunal-ambiental-de-valdivia-rechazo-reclamacion-de-municipio-de-coronel-contra-terminal-de-copec/
Recurso de reclamación ambiental del Municipio de Coronel por RCA de COPEC, 20 de Septiembre del 2020. https://www.diarioconstitucional.cl/wpcontent/uploads/2020/09/Escrito_principal.pdf
COPEC insiste en la construcción del proyecto Terminal Productos de Pacífico en Coronel https://www.mundomaritimo.cl/noticias/copec-insistira-con-proyecto-de-terminal-en-coronelpese-a-rechazo-de-comision-de-evaluacion-ambiental