Exequiel es el heredero de una libreta de ahorro de su padre, de la Asociación de Ahorro y Préstamos Libertad, escondida entre sus enseres domésticos por 45 años. En ella, el último registro marca poco más de 138 mil pesos, ahorrados en aquel momento con el objetivo de la casa propia.
En lugar de romperla y tirarla, Exequiel fue a la Tesorería General de la República a consultar. “La señora que me atendió me dijo, ‘yo veo que aquí tiene harta plata, pero para cobrarla va a tener que irse de juicio»”, contó al canal 24 Horas.
Así, en nombre de los 5 hermanos, el interesado acudió a Problemas.cl, donde le informaron que aquel dinero, en base al conversor que dispone el Instituto Nacional de Estadísticas, equivale actualmente a unos 753 millones de pesos.
La anécdota revela una realidad que en Chile, alcanza a miles de personas. Según un catastro realizado por la Cámara de Diputados en el año 2012, serían más de 65 mil personas las que podrían encontrarse en un caso similar al de Exequiel, promediándose como suma a cobrar los 300 millones de pesos.
De acuerdo a la nota del canal, se trata en su mayoría de libretas que fueron abiertas entre 1960 y 1986, y cuyos dineros nunca fueron devueltos a sus titulares por parte de las asociaciones de ahorro y préstamos que prevalecieron en Chile durante los años 70, tales como la Asociación Libertad, AhorroMut, Casa Propia, Bernardo O’Higgins y Patagonia.
Estas son cuatro de las seis instituciones que pasaron a formar la Asociación Nacional de Ahorro, que en 1990 fue liquidada por ley, pasando los ahorros de estas libretas al Fisco. Hoy, es posible el cobro de las cifras gracias a un fallo de la Corte Suprema, que “ordena a Hacienda someter a consideración del Presidente la cuenta de la caja de ahorro y préstamo, y poner a disposición de las personas la devolución de los fondos”, concluye la nota.