Coincidiendo con el Día Mundial para la Erradicación de la Violencia hacia las Mujeres, la presidenta Michelle Bachelet, junto a la ministra de la Mujer y la Equidad de Género, Claudia Pascual, firmó este viernes el proyecto de ley sobre el derecho de las mujeres a una vida libre de violencia.
Desde el Estadio Municipal de Independencia, donde conmemoró la efeméride, la mandataria expresó: «El proyecto que firmamos hoy consagra el derecho de las mujeres a una vida sin agresiones de ningún tipo». Informó que, entre otras cosas, se incluirá como delitos situaciones que hasta ahora no tenían castigo: el femicidio entre convivientes civiles y entre pololos.
Agregó que «con leyes no se evitan las agresiones, no bastan ya que hoy, ahora mismo, mujeres están en riesgo y tenemos que darles respuesta, por eso estamos aumentando las casas de acogida y de 23 que había, vamos a terminar con 48 cuando finalicemos el Gobierno».
Expresó que están aumentando la cantidad de centros de la mujer e inauguraron varios en distintas regiones y sectores del país. Dijo: «no queremos que ninguna mujer sea tratada como ciudadano de segunda categoría», y llamó a denunciar para que efectivamente no queden impunes los agresores y se pueda proteger a las víctimas como es debido.
La firma coincide con que durante esta jornada se realizará la marcha que desde 2005 convoca la Red Chilena contra la Violencia hacia las Mujeres, en contra de agresiones y femicidios.
En Chile al menos 2 millones y medio de mujeres son víctimas de algún tipo de violencia, y de ellas solo un 4% realiza una denuncia o búsqueda de ayuda. Además, se estima que las mujeres demoran en promedio siete años en denunciar. La principal razón por la que no se denuncia la violencia sicológica es porque no creen que fue algo serio y no lo consideran necesario (34,5%); en el caso del maltrato físico, 24,5% no lo acusaron porque tenían miedo; y el 40% de las mujeres que sufrieron violencia sexual callaron porque sintieron vergüenza de contar sobre su situación.