La idea es mantener a los chicos activos y entrenando para que no pierdan su condición física
Los jóvenes deportistas del programa Promesas Chile, de Magallanes, continúan con sus entrenamientos desde la casa para mantener su condición física y seguir con las pautas planteadas a inicios del 2020; de esta manera demuestran que la emergencia sanitaria por el COVID-19 no es un impedimento para continuar con sus rutinas.
En este contexto, el programa del Ministerio del Deporte e Instituto Nacional de Deportes, que reúne a 107 deportistas de 10 a 22 años en etapa de proyección y consolidación de las disciplinas deportivas focalizadas de la región, ideó fórmulas de entrenamiento en línea y actividades complementarias.
De esta manera, los deportistas de las disciplinas de atletismo, balonmano, esgrima, natación y judo están realizando sesiones de entrenamiento diarias de una a dos horas, usando la plataforma Zoom y monitoreadas por los técnicos de cada deporte, reseñó La Prensa Austral.
Según el metodólogo del Instituto Nacional de Deportes, Reidel Ladley, “los atletas se han mantenido en movimiento y debo felicitar a los técnicos por generar distintas actividades que han mantenido el interés y la convocatoria de cada uno de los deportistas. Aún en estas condiciones se ha evidenciado un trabajo permanente y sostenido para mejorar la formación atlética de nuestros deportistas”, señaló
Sobre el trabajo que han realizado en esta nueva modalidad, Sandra Moreno, la técnico de judo juvenil, indicó que “nos organizamos con el IND y hemos hecho charlas nutricionales y trabajos con el kinesiólogo, quien realizó sesiones físicas donde vimos, por ejemplo, ejercicios de autocarga, circuitos intermitentes y sesiones de flexibilidad (…) los deportistas que se pueden conectar han estado bien motivados y los que no tienen los medios para conectarse, graban sus sesiones y me las envían«.
La metodología para la natación
José Lezama, técnico de natación y colaborador desde su disciplina con distintas actividades, señaló: “nuestra intención en las primeras semanas fue atender el área psicológica y estuvimos trabajando con Mentalite, quienes están dedicados a la psicología de los deportes acuáticos. Nos brindó una base para los tiempos que se avecinaban, donde el encierro podía afectar a los niños y niñas”.
El entrenador destacó: “una de las ventajas que he visto dentro de la contingencia es que he podido fortalecer a chicos que estaban desfasados del nivel físico (…) He apostado todas las fichas a tomar conciencia en la nutrición, a que no se desmotiven y que entiendan que hay que aceptar esta situación que es totalmente atípica».
El objetivo de estas sesiones es que los jóvenes no pierdan su condición por falta de entrenamiento, para que cuando se incorporen a las actividades presenciales no pese en su desempeño el tiempo en confinamiento.
Fuentes: La Prensa Austral/Radio Polar.