El lunes 23 de enero, alrededor de las 16.00 horas, Paz Verónica Vidal, de 32 años, fue impactada por un vehículo conducido por Hilde de Vos, mujer de nacionalidad belga que transitaba en estado de ebriedad por la Ruta 68. La víctima se encontraba detenida en la berma.
El caso vuelve a poner en evidencia la necesidad de avanzar hacia una cultura de responsabilidad vial en la que nunca más tengamos que lamentar víctimas de delitos y siniestros viales producto de la inconsciencia de conductores que dejan de lado el valor de la vida poniendo en riesgo la propia y la de los demás.
Paz Verónica era una conductora precavida. El hecho de encontrarse en la berma tiene que ver justamente con eso pues, el trayecto desde Santiago a Valparaíso junto a su marido Andrei Legkow rumbo a su nuevo hogar, lo hacía acompañada de su querido gato Jules, que había escapado de su jaula obligándola a detenerse para evitar cualquier descuido que la hiciera perder el control de su vehículo poniendo en riesgo su vida.
Las pericias determinaron que Hilde de Vos, la mujer que conducía en estado de ebriedad y que le quitó la vida a Paz, registró 2,4 grados alcohólicos en la sangre. Se trata de un delito tipificado por la Ley Emilia con penas que van de 3 años y 1 día a 10 años de presidio. Sin embargo, tras ser formalizada el día de ayer por conducción en estado de ebriedad con resultado de lesiones graves gravísimas, De Vos quedó con medidas cautelares de arresto domiciliario total, las cuales serán objeto de apelación por parte de la Fiscalía Local de Pudahuel para obtener la prisión preventiva. Además, en los próximos días debiera programarse una audiencia para reformalizar la investigación por conducción en estado de ebriedad con resultado de muerte.
“Como Fundación recibimos el llamado de la familia Legkow Vidal, tal como recibimos el de otras cientos de familias víctimas de la conducción irresponsable. Acompañaremos a Andrei y toda la familia de Paz para que se haga justicia y la Ley Emilia se aplique con la severidad que el caso amerita. No los dejaremos solos”, enfatizó Carolina Figueroa, Presidenta de la Fundación que lleva el nombre de su hija, fallecida hace ya cuatro años víctima de un conductor ebrio.
Vía Fundación Emilia.