Organizaciones y parlamentarias lanzan mesa de trabajo por un “Parto Respetado”

“Lo que busca esta ley es hacer un cambio estructural en la atención de salud, en el ámbito de los partos, que permita tanto a quienes asisten los partos como a las pacientes, estar en un ambiente digno, respetado y no tan traumático”, señaló la diputada Claudia Mix, una de las impulsoras de la iniciativa.

Organizaciones y parlamentarias lanzan mesa de trabajo por un “Parto Respetado”

Autor: Felipe Menares

Este miércoles se realizó en la sede de Santiago del Congreso Nacional el lanzamiento de la Mesa de Trabajo por un Parto Respetado en Chile. En la instancia participan organizaciones de la sociedad civil y parlamentarias de oposición, cuyo objetivo es elaborar un proyecto de ley que mejore las condiciones que viven las mujeres en las atenciones gineco-obstétricas en el país.

“Lo que busca esta ley es hacer un cambio estructural en la atención de salud, en el ámbito de los partos, que permita tanto a quienes asisten los partos como a las pacientes, estar en un ambiente digno, respetado y no tan traumático”, señaló la diputada Claudia Mix (Poder Ciudadano), una de las impulsoras de la iniciativa.

La parlamentaria frenteamplista sostuvo que los episodios de violencia obstétrica no solo vulneran los derechos de una mujer, sino que también “el derecho de una familia”. Eso sí, aclaró que no buscan “criminalizar a los trabajadores de la salud, sino asegurar un derecho a la mujer, tan importante en la vida de quien decide tener hijos”. En este sentido, precisó que el proyecto busca asegurar que el parto “sea acordado con la paciente, en un ambiente saludable y amigable, tanto para la mujer como para ese niño que está por nacer”.

¿Cuán violentadas son las mujeres durante el parto?

En la actividad también se presentaron los resultados de la Primera Encuesta sobre el Nacimiento en Chile, desarrollada por Observatorio de Violencia Obstétrica. El estudio es de carácter descriptivo poblacional y contó con la participación de más de 11 mil mujeres que parieron en Chile entre los años 1970 y 2017, aunque las experiencias de parto se presentan organizadas según su ocurrencia en tres periodos de tiempo: 1970 a 2008, 2009 a 2013, y 2014 a 2017.

Las respuestas de las mujeres encuestadas, entregadas mediante un cuestionario en línea, sirvieron como insumo para el análisis sobre los partos o cesáreas ocurridos en hospitales públicos y clínicas privadas.

Uno de los rasgos medidos por la encuesta corresponde a la violencia verbal registrada en los casos de abuso en la atención de nacimientos. En este sentido, el estudio arroja una disminución de las expresiones del abuso verbal en hospitales, siendo la crítica y/o represión de expresiones de dolor y emociones la que se reporta con mayor frecuencia en todos los periodos, pasando de un 69,9% en 1970-2008 a un 43,4% en 2014-2017.

En el caso de las clínicas, también se observa un descenso en el abuso verbal, al igual que un mayor reporte de episodios de crítica y/o represión de expresiones de dolor y emociones. Sin embargo, las expresiones de infantilización de las mujeres igual presentan una alta proporción de denuncias, aun cuando han experimentado una disminución mucho más marcada.

Las mujeres encuestadas respondieron además si durante la atención del nacimiento vivieron alguna situación de contacto físico irrespetuoso de parte del personal de salud que las atendió, como manotazos, zamarreo, empujones, toques molestos. Tanto en hospitales como en clínicas se registró una disminución de la percepción de abuso físico a través del tiempo.

En los recintos públicos, la violencia física alcanzaba un 31% en el período 1970-2008, estadística que descendió a un 17,5% en el período 2014-2017; mientras que en establecimientos privados se pasó en un 8,3% en 1970-2008 a un 5,3% entre 2014-2017.

Por otro lado, la discusión propuesta por el estudio plantea la necesidad de modificar los contenidos abordados en las carreras del área salud, como uno de los medios para mejorar las condiciones de nacimiento en el país.

De acuerdo a la medición, “las universidades que forman a los profesionales de la salud que otorgan los cuidados maternos deben incluir en las mallas curriculares contenidos relacionados con parto personalizado, derechos del nacimiento, modelos de atención del nacimiento para entender los modelos de transición, otorgar más herramientas para el acompañamiento con prestaciones no médicas, en virtud de reducir la excesiva medicalización”.


Reels

Ver Más »
Busca en El Ciudadano