Entre enero de 2016 y febrero de este año, la Policía de Investigaciones ordenó la apertura de 1.163 sumarios administrativos, de los cuales 93 se iniciaron al interior de la escuela matriz de la institución. Hasta abril pasado, 66 investigaciones se mantenían pendientes, según reveló Emol, a propósito de la investigación del Ministerio Público por posible fraude en las filas de la policía civil.
El pasado jueves, se dio a conocer que el abogado y oficial de Enlace de la PDI, Alejandro Vignolo Morris, denunció, a fines de junio y ante el Ministerio Público, la posible comisión de los delitos de “omisión de denuncia” y “encubrimiento” por parte de altos funcionarios.
En particular, acusó al secretario de Estudios de la Escuela de Investigaciones Policiales, comisario Manuel Muñoz Soto, de solicitar pagos y beneficios “en forma constante” a un grupo de docentes, a cambio de mantenerlos como profesores institucionales.
Si bien el denunciante entregó los antecedentes a través de los canales internos de la PDI, la falta de resultados lo impulsó a denunciar ante fiscalía, comprometiendo a los funcionarios que recibieron la información en primera instancia.
El vespertino La Segunda reveló algunos de los mensajes de WhatsApp que habría enviado el comisario Muñoz Soto a otros colegas, solicitando regalías a cambio de favores. «Williams…mañana pasa a dejar las centollas que le prometiste… estaré atento…”, escribió el 16 de abril de 2017 en un grupo de conversación que compartía con un grupo de docentes de la Escuela de Investigaciones Policiales.
«Por las clases que no has hecho…. Y que han pasado piola… Y que te pagan”, fue otro de los mensajes de Muñoz, revelados por La Segunda y que fueron entregados por Vignolo Morris al Departamento de Asuntos Internos de la PDI.
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