Estaba en el calabozo, pidió permiso para ir al baño y no se le vio más. Esa es la historia de un hombre que fue detenido en Rancagua, luego de que su pareja concurriera a la Primera Comisaría de Carabineros de la ciudad, y lo denunciara por violencia intrafamiliar.
El hombre, según informa TVN, habría seguido a la mujer hasta el mismísimo retén, para evitar procedimientos. Los funcionarios policiales, tras ratificar que había una orden de alejamiento de por medio, lo metieron al calabozo. Fue detenido por autor de violencia intrafamiliar.
Lo que ocurrió después, horas más tarde, fue la huída. El hombre se encontraba entre las rejas y pidió permiso para ir al baño. La celda fue abierta. Transcurridos varios minutos, y tras reparar en que el detenido no regresaba, los carabineros se dieron cuenta de que se había dado a la fuga. Este hecho generó un gran operativo por las calles rancagüinas, y luego de una hora lograron capturar al fugitivo.