Este miércoles, los pescadores artesanales de Mejillones presentaron una demanda de indemnización por perjuicios en contra de la Minera Michilla S.A., perteneciente al grupo Luksic, por el vertimiento de 2.400 litros de ácido sulfúrico en el Puerto Michilla, ocurrido en septiembre de 2017.
Según consigna radio Bío Bío, la acción judicial fue interpuesta a través del abogado Cesar Antonio Barra en representación de 219 pescadores arsenales, recolectores de orilla y buzos mariscadores, quienes exigen el pago 13.140 millones de pesos ante la Corte de Apelaciones de Antofagasta.
El hecho fue reconocido por la empresa, que a través de un comunicado, admitió el derrame, señalando que “un minuto después de detectado el evento, se produjo la detención inmediata de la descarga de ácido, lo que permitió controlar los posibles efectos de este incidente”.
Debido a esta situación, añade la declaración de la empresa, las embarcaciones no pudieron utilizar el puerto durante al menos dos días. Sin embargo, pescadores artesanales y grupos ambientalistas cuestionan esta versión, e indican que la emergencia se extendió mucho más de lo que asegura la empresa, perteneciente a Antofagasta Minerals, y que el daño se expresó en la masiva muerte de aves, animales y la consiguiente pérdida de importantes recursos marinos.
“Las aguas de Mejillones fueron contaminadas por la negligencia de una empresa minera que esta vez derramó un tóxica sustancia como es el ácido sulfúrico, poniendo en riesgo el ecosistema del lugar y la salud de los habitantes. Se deben exigir las medidas necesarias serias para evitar que los derrames sigan ocurriendo en nuestros mares”, indicó Mauricio Ceballos, vocero de Greenpeace, a la emisora, quien dijo que ahora sólo resta esperar que la justicia determine las responsabilidades de este nuevo atentado contra el medioambiente en Chile.