Esta semana, la Fiscalía Nacional Económica (FNE) advirtió mediante un informe preliminar que el mercado de gas licuado en Chile «no está funcionando desde una perspectiva competitiva», refiriéndose a los segmentos de gas licuado de petróleo (GLP) y gas natural (GN), en el período comprendido entre 2010 y 2020.
Por ello, se sugirió al Ejecutivo prohibir que Gasco, Abastible y Lipigas participen en la distribución minorista del recurso, es decir, la venta directa a consumidores. Con esta prohibición a las empresas mayoristas, se busca que los distribuidores minoristas, que actualmente son 5.600 en todo el país, puedan vender cilindros de gas sin estar amarrados a una compañía en particular, lo que les permitiría escoger libremente a la que ofrezca el mejor precio.
Frente a este informe, dos de las empresas cuestionadas entregaron su versión de los hechos mediante comunicados. Desde Lipigas señalaron que Chile importa el GLP que se consume en el país, por lo que el precio de éste depende “directamente del precio internacional, el cual ha aumentado más de 100% solo en los últimos 12 meses”, asegurando que ese es el motivo que “ha gatillado el alza a nivel nacional”.
Sin embargo, lo que se plantea en el informe de la FNE es que entre 2014 y 2020 los distribuidores mayoristas de GLP “han aumentado sus márgenes, mientras sus costos han caído, lo que significa que no han traspasado íntegramente a los consumidores finales las bajas que han tenido en sus costos”.
En ese sentido, Lipigas afirmó que revisará el tema “en profundidad” cada uno de los puntos expuestos y que será parte de cualquier discusión técnica: “Buscamos que las medidas que se tomen efectivamente cumplan el objetivo de perfeccionar el mercado en favor de los consumidores finales”, dijo la empresa.
Por su parte, Abastible indicó que su prioridad es actuar bajo estándares de máxima seguridad y calidad “siempre en el marco de la normativa vigente, para potenciar un crecimiento sostenible en los ámbitos social, económico y medioambiental”.
De acuerdo al informe de la Fiscalía, si se llevaran a cabo la prohibición de distribución minorista para estas tres empresas, el precio del gas licuado disminuiría alrededor de un 15%. Es decir, si un cilindro de gas de 15 kilos bordea los $18.900 según datos de Gas en Línea, por lo que debería quedar con un precio final de $16.070. Por su parte, el cilindro de 11 kilos actualmente rodea los $14.800 con venta en local. Si se siguieran las indicaciones, su valor final sería de 12.580.