Nunca es tarde para soñar: Profesor de 85 años se matricula en Ingeniería Civil

A los 85 años, Luis Alberto Canales Díaz demuestra que los sueños no tienen fecha de expiración.

En Puerto Montt, el profesor de educación básica Luis Alberto Canales Díaz ha dado una lección de vida al matricularse en la carrera de Ingeniería Civil en Obras Civiles en la Universidad de Los Lagos. A sus 85 años, don Luis cumplirá un sueño que llevaba consigo desde su infancia, demostrando que la perseverancia y el deseo de aprender no tienen límites.

Un sueño que esperó décadas

Luis, quien nació en Santiago y estudió en el Liceo 9 de Quinta Normal, relató que su interés por la ingeniería civil surgió mientras acompañaba a su padre, un trabajador del Ministerio de Obras Públicas. Sin embargo, una tragedia familiar lo obligó a postergar sus aspiraciones, optando por estudiar Pedagogía General Básica en lugar de ingeniería.

A pesar de los años, su determinación nunca disminuyó. Ya en 2022, Canales había dado de qué hablar al matricularse en Técnico Universitario en Informática, también en la Universidad de Los Lagos. Pero su meta era más ambiciosa. “Ahora sí, quiero hacer esto con toda mi alma”, señaló a El Calbucano al inscribirse en la carrera que siempre deseó estudiar.

Un camino lleno de desafíos

El ingreso a Ingeniería Civil no fue sencillo. Luis enfrentó obstáculos administrativos, como la pérdida de sus certificados de educación media, lo que lo llevó a retomar sus estudios escolares. “Tuve que volver al colegio, a estudiar las asignaturas de educación media y obtuve promedio 6,6, aunque en Matemáticas terminé con promedio 7”, comentó orgulloso.

Apoyado por su esposa, sus dos hijas y cuatro hijos, don Luis se presentó en las dependencias de Chinquihue con su puntaje PAES para hacer realidad su anhelo. El anuncio de su inscripción generó alegría entre los docentes y estudiantes de la universidad.

Inspiración para todos

El caso de Luis Alberto Canales Díaz es un recordatorio de que nunca es tarde para perseguir los sueños. Con su entusiasmo y determinación, este profesor jubilado nos invita a reflexionar sobre la importancia de mantener viva la curiosidad y las metas personales.