«El proyecto jibariza a la Conaf»: Profesionales cuestionan iniciativa que crea el Servicio Nacional Forestal

Como una “victoria” calificó el presidente del Sindicato de Profesionales de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), Ricardo Heinsohn, el hecho de que el Senado decidiera aplazar el pasado lunes 5 de marzo las indicaciones al proyecto de ley que tiene como objetivo crear el Servicio Nacional Forestal (Sernafor) y que se encuentra en su segundo trámite constitucional con carácter de suma urgencia. “Sino tendríamos una ley aprobada y a punto de publicar”, sostiene el dirigente, quien recalca que la decisión de los parlamentarios fue influida por los reparos de la organización que dirige y de varias otras que participaron en este proceso legislativo, entregando su visión al respecto.

Para Heinsohn, el proyecto “jibarizaba” a la Conaf, le restaba atribuciones y creaba un organismo burocratizado e ineficiente, incapaz de brindar cobertura a la totalidad de las zonas del país. Pero este lunes, después de un largo debate en la comisión unida de Agricultura y Medio Ambiente del Senado, se determinó que se aplazaba y que los parlamentarios no iban a revisar las indicaciones presentadas por diversas organizaciones, sino que dejaban la decisión de este proyecto para los próximos congresistas que asumirán en la Cámara Alta.

“Esto es lo que buscábamos, que (los parlamentarios) se dieran el tiempo para que discutieran un buen proyecto de ley para el país”, explica el dirigente, insistiendo en que la actual propuesta tenía “muchas falencias”. Junto con ello explica que lo que actualmente hace Conaf sobrepasa las atribuciones que estaban proponiendo en la ley para el Servicio Nacional Forestal, porque -dice-  “habían muchas funciones que no estaban contempladas, por lo tanto, no las iba a poder hacer ningún otro ente”. Pero más grave -añade- era que «no contemplaba funciones sancionatorias reales, para que el servicio cursase multas severas”.

Foto: Flickr Conaf

Heinsohn aclaró que tampoco se hizo Consulta Indígena, que hicieron “algo parecido”, frente a lo que muchos dirigentes de comunidades originarias manifestaron que no habían sido consultados, por lo tanto, en conjunto generaron presión para que los parlamentarios decidieran aplazar esta decisión.

“Nosotros queremos que se legisle, pero que se haga bien y no entre gallos y medianoche”, sostiene el dirigente gremial.

«Esta ley estaba a la pinta de la dirección ejecutiva y nada más»

El presidente del sindicato denunció que en este proceso pasaron a llevar a los trabajadores, pues acusa que se desestimó el trabajo interno participativo de dos años (entre 2014 y 2016) realizado al interior de Conaf. “Nada de eso, que fue trabajado entre todos los estamentos, se acogió. En el fondo, esta ley estaba a la pinta de la dirección ejecutiva y nada más”, sostiene.

Heinsohn busca que el Servicio pueda tener, al menos, las mismas facultades que la actual Conaf, y -advierte- “eso no se aseguraba en el proyecto”. Por eso dice que era necesario tener mayor claridad en algunos temas técnicos. “Conaf y quien le suceda, debe tener la administración y tuición de las áreas silvestres protegidas y que no pasen al nuevo servicio de biodiversidad”, argumenta.

Además de lo anterior, denuncia que el proyecto de ley dejaba sin garantías laborales a los trabajadores, pues no se aseguraba que el personal de la Conaf pasaría a ser del nuevo Servicio Nacional Forestal. Por eso sostiene que “se estaba precarizando y la estabilidad laboral se estaba viendo desmejorada”.

Pese a todo, confía en que el nuevo parlamento mejorará la iniciativa. “Esperamos que van a acoger… de hecho, se abrió espacio para que más organizaciones hagan llegar sus comentarios”, expresa Ricardo Heinsohn. Con esto -concluye- “el país gana”.