La Radio Agricultura decidió suspender de sus funciones a Fernando Villegas, conductor de los programas Las cosas por su nombre (que se transmite en la mañana), Dos para las cinco (en las tardes, con Alvaro Salas) y Todas las noches son viernes.
Esto, luego de la publicación de un reportaje en The Clinic (La lascivia de Fernando Villegas) donde una treintena de entrevistados relata cómo Villegas dedicaba miradas lascivas y comentarios obscenos que en la actualidad motivaría más de una denuncia por acoso.
Según consigna el propio The Clinic, debido a la repercusión que tuvo el reportaje en los medios de comunicación, la dirección de Agricultura determinó suspenderlo de sus funciones a partir de hoy (lunes), mientras el directorio resuelve sobre su permanencia en la estación.
Según las fuentes citadas por dicho medio, el programa de la tarde sería cancelado definitivamente, mientras que en el de la mañana se buscará, por el momento, un reemplazante para el comentarista.
Uno de los testimonios publicados en el reportaje corresponde a Piri Riveros, maquilladora, quien relató su experiencia con el sociólogo: «En eso, siento una mirada muy inquisidora. Como había un ventanal de cristal detrás de nosotros, podía ver quién entraba y salía al área de maquillaje, peluquería y vestuario. Miro por el reflejo y me doy cuenta de que viene un caballero muy alto, que ya me está mirando el trasero sin disimulo. Era Fernando Villegas. No me saludó, pero mirándome de pies a cabeza, me dijo: ‘¿Dónde está la otra del turno? ¿Esa, la tetona?’ Le respondí que el turno me tocaba a mí y que por favor se sentara para maquillarlo, porque me tenía muy incómoda por la forma en que me miraba el trasero. ‘Uy, me saliste chúcara’, respondió».
Riveros detalla que hasta ese momento, no conocía a Villegas ni había tratado con él, pero esos primeros segundos le bastaron para que se sintiera “hastiada hasta por su forma de hablar, y por su mirada tan libidinosa que llegaba a incomodar, sin siquiera decir una palabra”.
«Quería terminar muy rápido de maquillarlo. Me dijo que parecía geisha por mis ojos rasgados, y preguntó si acaso yo sabía a lo que se dedicaban las geishas. Al final terminé y al pararse me quedó mirando, y me dijo: ‘Mmm, tenís buen culo, ah’, y se fue. En la semana pensaba que venía el turno del domingo y era terrible, porque tenía que estar sola con Fernando Villegas. En los restantes programas siempre lo escuché referirse a mujeres por el poto o las tetas. Fue horrible. Era como un hombre obsesionado con eso», acusa la maquilladora.
Finalmente, Riveros cuenta que estuvo un mes a cargo de ese turno, hasta que se lo destinaron a otra compañera. Sin embargo -agregó- «no estaba dispuesta a que las demás maquilladoras pasaran por lo mismo», por lo que decidió ir a expresar su malestar ante Jaime de Aguirre y Pablo Morales, productores del canal en ese tiempo.
«Junto a otras maquilladoras, se les dijo personalmente que nos incomodaba que Fernando se refiriera a compañeras de la forma en que lo hacía, o que hablara de cosas sexuales mientras lo maquillábamos. Ellos le bajaron el perfil a la situación, lo interpretaron como que Villegas era un hombre fresco no más», indica la profesional.