Este martes 15 de noviembre, la Cámara de Diputadas y Diputados aprobó otorgar 17 escaños reservados a pueblos originarios en el próximo órgano constituyente encargado de redactar la nueva Carta Magna.
Con 140 votos a favor, siete en contra y dos abstenciones, el proyecto pasará al Senado para su último trámite legislativo.
El acuerdo de la Comisión Mixta contempla un padrón especial para la votación, además de 17 escaños dentro de los 155 convencionales constituyentes, que desglosa así: 7 escaños para el pueblo mapuche, 2 para el pueblo aymara, 1 para el pueblo rapa nui, 1 para el pueblo quechua, 1 para el pueblo atacameño, 1 para el pueblo diaguita, 1 para el pueblo colla, 1 para el pueblo kawashkar, 1 para el pueblo yagán y 1 para el pueblo chango.
Por otra parte, el escaño para personas afrodescendientes no alcanzó el quorum requerido y fue rechazado, porque obtuvo sólo 82 votos a favor, 49 en contra y 17 abstenciones. Necesitaba 93 votos afirmativos para su aprobación.
Ante lo sucedido, la diputada del Partido Comunista (PC) Carmen Hertz dijo: “seamos sinceros, no nos contemos falsas historias. Los pueblos originarios demandaron escaños reservados supernumerarios por sobre los 155 integrantes originales de la Convención, como también un criterio de autoidentificación para votar esos escaños. Lamentablemente, la oposición presente en la comisión mixta cedió a todas y cada una de las condiciones impuestas por la derecha. Esta es una capitulación que tendrá consecuencias políticas“.
Por su parte, Cristóbal Urruticoechea, del partido Renovación Nacional (RN,) reclamó que “establecer cupos reservados para los pueblos originarios constituye una verdadera discriminación, pues implica infringir la garantía de la igualdad ante la ley para favorecer a algunos individuos con independencia de sus méritos y capacidades reales”.
Finalmente, Matías Walker, presidente de la Comisión de Constitución, lamentó que no se alcanzaran los votos para sumar al pueblo afrodescendiente. A su juicio, se trata de “un acto de racismo y hasta de ignorancia”.
Fuentes: El Desconcierto/El Mostrador.