Sebastián Sichel se convirtió el domingo en el candidato de Chile Vamos a las elecciones presidenciales de noviembre, tras imponerse en primarias con un 49,13% de los votos, frente a un 31,31% de Joaquín Lavín de la UDI (quien se presentaba por tercera vez ), 9,81% de Ignacio Briones de Evópoli y un 9,80% de Mario Desbordes (RN).
Aunque el abogado de 43 años, magíster en derecho público con mención en derecho constitucional, ha insistido en que su supuesta independencia, su historial confirma sus fuertes lazos con la derecha y los grandes poderes económicos.
Camaleón que salta de un partido a otro
Sichel ingresó a la política en las filas de la Democracia Cristiana (DC) en 2003, debido a su cercanía con el expresidente Patricio Aylwin bajo el cobijo de Claudio Orrego cuando éste se desempeñaba como alcalde en Peñalolén.
Entre 2006 y 2008 Sichel trabajó para el gobierno de Michelle Bachelet como subdirector del Sernatur y entre el 2008 y 2010 como jefe de asesores del Ministerio de Economía
El 2015 renunció al DC junto al el exministro de Bachelet, Andrés Velasco y el empresario Juan José Santa Cruz, para formar el partido “Ciudadanos”.
El 19 de noviembre de 2017 decidió apoyar públicamente a Sebastián Piñera, distanciándose de Andrés Velasco.
Durante el segundo gobierno de Sebastián Piñera, Sichel sumió como vicepresidente ejecutivo de Corfo, a partir del 2 de mayo de 2018, convirtiéndose en el primer miembro del partido Ciudadanos en ocupar un cargo público, tomando el mando de los contratos de explotación de litio firmados por su antecesor Eduardo Bitrán, con la empresa SQM.
Tras la crisis que experimentó Ciudadanos durante la elección de su directiva, Sichel renunció al partido y fue uno de los fundadores del movimiento político «Libres» en marzo de 2019, encabezado por exmilitantes del partido liderado por Andrés Velasco.
El 13 de junio de 2019 asumió como ministro de Desarrollo Social y Familia, cargo que ocupó hasta el 4 de junio de 2020, cuando fue nombrado por Sebastián Piñera como presidente del Banco del Estado, hasta cuando decide renunciar para aspirar a La Moneda.
Utilizó su cargo en BacoEstado como vitrina política
En julio de 2014, Sebastián Sichel fue cuestionado porque su empresa Paréntesis ganó una licitación para asesoría comunicacional de más de $95 millones para el Instituto Nacional de la Juventud que dirigía su amigo, el DC Nicolás Preuss.
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Tras dejar su cargo en Banco Estado, el 18 de diciembre de 2020, desde el sindicato de trabajadores denunciaron que el abogado estuvo más preocupado por sus prospectos políticos y concentrado en hacer campaña que en promover los intereses de la entidad.
“Fue la administración más nefasta que hayamos tenido”, dijo el presidente del sindicato único de BancoEstado, Marco Beas, en declaraciones a Interferencia.
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“Hubo un desorden estructural en el banco porque la cabeza de éste estaba más preocupada de su campaña personal y presidencial, que de administrar un banco público con ese nivel de afluencia en medio de una pandemia”, afirmó al tiempo que destacó que Sichel “convirtió cada idea del banco en una propuesta de campaña, apareciendo ejecutivo y resuelto, cuando en realidad lo único que le importaba era lucirse”.
“Del cien por ciento de sus minutos en televisión, él hablaba 95% de él y sólo 5% del banco y cuando lo hacía (hablaba del banco), prometía cosas que no se podían cumplir. Puro humo”, condenó.
“Ocupaba los medios para dar a conocer supuestos avances o políticas del banco y señalaba que se haría tal o cual cosa y la estructura del banco no sabía, no estaban implementadas las políticas que proponía, no estaban cargadas en el sistema ni mucho menos estábamos enterados los trabajadores. Y no lo hizo una vez, lo hizo muchas. Decía, gran hipotecazo para las familias y se llenaban los bancos al día siguiente. Teníamos que estar viendo los matinales para enterarnos de las políticas del banco. Los productos se preparan y se ratifican, luego se lanzan”, subrayó.
Otro de los trabajadores coincidió con esta apreciación y recordó que Sichel “llegó a BancoEstado y nunca sentimos que él estaba comprometido, es muy mediático”.
«Trajo al banco a la gente de comunicaciones que trabajaba con él, puso dos gerentes en un área que no daba para tanto y eso en desmedro de otras áreas que requerían más atención. El venía a hacer campaña«, agregó.
Como presidente de BancoEstado , Sichel aplicó en la institución una reestructuración interna, donde instaló en algunos cargos a sus asesores más cercanos del Ministerio de Desarrollo Social (MDS), como también despidió a mucho personal. La gerencia de Comunicaciones cambió de nombre y pasó a denominarse Gerencia Corporativa de Comunicaciones, liderada por el periodista Hernán López, quien era el jefe de comunicaciones del MDS en el período de Sichel y que lo acompaña en el mismo cargo desde que había sido nombrado vicepresidente de Corfo.
También se creó la división de Asuntos Públicos y Sostenibilidad dirigida por María Victoria Paz, exjefa de asesores del MDS, quien también acompaña a Sichel desde su paso por la Corfo cuando se desempeñó como directora de estrategia y sustentabilidad. Asimismo, se creó la nueva gerencia de Publicidad, liderada por Jonás Preller, exdirector de Pulso.
Ante las denuncias de los trabajadores, la bancada de diputadas y diputados del PPD envió un oficio a la Contraloría General de la República para solicitar una antecedentes e investigación sobre eventuales vulneraciones al principio de prescindencia política por parte Sebastián Sichel, y su equipo, durante su gestión como presidente del BancoEstado.
El oficio suscrito por los parlamentarios Loreto Carvajal, Ricardo Celis, Carolina Marzán, Tucapel Jiménez, Cristina Girardi, Andrea Parra, Rodrigo González y el independiente Patricio Rosas planteó que mientras Sichel estuvo a cargo de la entidad bancaria “se caracterizó por mediáticos anuncios, muchas veces erráticos, que distaban bastante del perfil esencialmente técnico que demanda el cargo, toda vez que BancoEstado es una de las instituciones más importantes para las personas que habitan en nuestro país”.
Además, señalaron que el propio sindicato de trabajadores manifestó públicamente “sentirse aliviados con su salida, toda vez que consideran su estadía al mando del Banco como una plataforma utilizada para promocionar su figura política, más que para ejercer un mandato tendiente a mejorar las condiciones y calidad del servicio prestado a los ciudadanos”.
«La peor expresión de la derecha«
Aunque Sebastián Sichel ha insistido en presentarse como un candidato «independiente», la realidad es que contó con el esencial respaldo de figuras de la derecha y del empresariado de las que se intentó desligar durante su campaña.
El filósofo y académico, Hugo Herrera, se refirió recientemente a la candidatura del ahora abanderado de Chile Vamos.
«Sichel es la peor expresión de la derecha, es una candidatura levantada no desde las bases de partidarias, es una candidatura levantada por empresarios que ponen plata, Juan José Santacruz y Jorge Errázuriz,y los fácticos Andrés Allamand (RN) y Andrés Chadwick (UDI)», afirmó a 24 Horas..
«Es la vieja derecha, son testaferros de la vieja derecha, de los poderes económicos que han hundido a la derecha política; que tienen empantanado al gobierno y han conducido al fracaso a este segundo gobierno de Piñera. Dos gobiernos de centro derecha en el siglo 21, son dos fracasos por culpa de gente que están detrás de esta campaña», subrayó.
En enero pasado, un artículo de Interferencia mencionó 10 nombres de actores que trabajaron arduamente para levantar la campaña de Sichel y conseguir el dinero y los apoyos políticos necesarios para convertirlo en la carta presidencial de la derecha.
Estos diez nombres corresponden a: Sebastián Piñera (ex RN), Andrés Chadwick (UDI), Marcela Cubillos (ex UDI), Andrés Allamand (RN), Tomás Fuentes (RN), Camila Flores (RN), Diego Schalper (RN), Mariana Aylwin (ex DC), Juan José Santa Cruz y Jorge Errázuriz.
$207 millones en aportes de los grandes grupos económicos
La fundación Sol, por su parte, reveló que durante la campaña de las primarias presidenciales, Sebastián Sichel recibió más de $207 millones en aportes por parte de los grandes grupos económicos.
Entre los principales financistas del ahora candidato a la presidencia de ChileVamos, figuran el pesidente de Primus Capital, empresa de soluciones financieras, Raimundo Valenzuela con un total de $14.567.500 junto con María Alejandra Reymond, esposa de Valenzuela con un aporte de $14.567.500.
Asimismo, entre los aportes se encuentran los del empresario Jorge Claro, del grupo Prisma – ex presidente del Club deportivo UC, Jorge Claro, con un total de $14.000.000. El Empresario Juan José Santa Cruz, un aporte de $10.000.000, Patricio Artiagoitia, ex vicepresidente de Enami, con $10.000.000, Rafael Guilisasti, ex presidente de la CPC y del grupo Guilisasti Viña Concha y Toro, con $10.000.000.
Gabriel Boric: «Sichel es el candidato del gobierno de Sebastián Piñera»
Tras la victoria de este domingo en las primarias, el cadidato de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric, ofreció entrevista con Tolerancia Cero de CNN, en la que destacó sus diferencias con el abanderado de Chile Vamos.
“Hay una diferencia clara y nítida: Sebastián Sichel es el candidato del gobierno de Sebastián Piñera, es la continuidad de la derecha que no ha sabido darle gobernabilidad al país, que manejó de mala manera una crisis tanto política como sanitaria, que hoy día tiene muy baja confianza de la ciudadanía”.
Sichel es la continuidad de Sebastián Piñera y esa es nuestra principal diferencia”, subrayó.
Cabe recordar que Sichel ha dejado en claro que se siente orgulloso de haber formado parte de la administración del actual gobierno.
“Siempre he dicho que estoy orgulloso de haber sido ministro del Presidente Piñera y presidente del Banco Estado”. afirmó durante la campaña de las primarias.