La primera vez que la fiscal Carolina Cabllero fue acosada laboralmente por su jefe, el fiscal regional de Coquimbo Adrián Vega, durante el estallido social, cuando debía visitar las comisarías de Carabineros para recopilar información respecto a detenciones o presuntas violaciones a los DD.HH. en la región.
“La sra. fiscal manifestó que cuando estuviera de turno concurriría en horas de la noche a las unidades policiales, específicamente de Carabineros, reaccionando de manera enérgica y prepotente el Fiscal Regional, parándose de su asiento, colocando su cuerpo por sobre el escritorio que los separaba, manifestando: ‘¡No, el que manda aquí soy yo, no vas a ir a ninguna parte, tienes prohibido de concurrir a la comisaría en ese horario!’. En ese momento mi representada se asustó y estando sentada en la silla frente al escritorio (…) puso sus manos con las palmas abiertas, para detenerlo y le respondió ‘¡Cálmate, cálmate por favor, ok, ¡no asistiré!’”, se lee en la tutela laboral, y que fue presentada ante el Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago.
No obstante, los episodios de acoso laboral continuaron, puesto que, la fiscal recuerda -en su tutela laboral- el caso de unos jóvenes que fueron detenidos y agredidos en una manifestación, y que durante su traslado a la 1ª Comisaría de La Serena -la que concentraba la mayor cantidad de casos de violaciones a los DD.HH.- fueron sometidos a violencia física y psicológica con amenazas de “tirarlos al mar al igual que los detenidos desaparecidos”, si no cantaban la última estrofa del Himno Nacional y el himno de carabineros, entre otros.
Por lo anterior, Vega le dijo a Caballero que estaba perdiendo la objetividad por lo sucedido con su abuelo, y que se estaba convirtiendo en una defensora de DD.HH. Cabe mencionar que el abuelo de la fiscal fue víctima de vulneraciones durante la dictadura.
“El día 8 de enero de 2020, el fiscal regional concurrió hasta la oficina de mi representada, a notificarla personalmente de que había tomado la decisión de sacarla de las investigaciones, manifestándole en la ocasión ‘¡qué te crees, yo tengo prestigio entre los jueces del tribunal oral, qué te crees si tu no tienes asignadas las causas de los fallecidos, qué te crees, si no estás investigando ejecutados políticos ni desapariciones forzadas!”, detalla el documento judicial.
Según los antecedentes de este caso, el ex Fiscal Nacional, Jorge Abbott, tuvo conocimiento de este maltrato laboral en contra de la fiscal, pero no activó ninguna investigación para sancionar a los responsables.
Por lo anterior, el abogado de Carolina Caballero, Fernando Leal, presentó una tutela laboral, la que finalmente fue resuelta por el 1° Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago, el 4 de diciembre de 2023 y rectificada el 31 de julio de este año, acogiéndose la denuncia, por lo que se declara «vulnerada la garantía de integridad física y psíquica por parte del entonces Fiscal Regional Adrián Vega, el Fiscal Adjunto señor Carlos Vidal y el Fiscal Nacional señor Abbott, este último por omisión».
«Que el señor Fiscal Nacional inicie de oficio una investigación de los hechos constitutivos de maltrato o acoso laboral, en contra de los señor Carlos Vidal Mercado y Adrián Vega ya individualizados, en la que se determine la responsabilidad y se apliquen las sanciones pertinentes (…) y que se disponga el otorgamiento de disculpas públicas por los otros dos Fiscales aludidos, las que se harán constar en las
dependencias de la Fiscalía Regional», se lee en la sentencia a la que este medio tuvo acceso, y en donde también se especifica que el Ministerio Público deberá pagar la sumar de $20.000.000.
Respecto a esto, el abogado de la denunciante, Fernando Leal, aseguró que esta es una sentencia de mucha relevancia, ya que, es condenado al Ministerio Público por haber vulnerado la integridad física, y psíquica a una de sus trabajadoras.
-Lo trascendente de esta sentencia que junto con declararse de que ella fue vulnerada en su integridad, se establece claramente quienes son los responsables de tal acto. Y se indican como responsables al entonces Fiscal Regional de Coquimbo, Adrián Vega, al fiscal adjunto, Carlos Vidal, y al Fiscal Nacional, Jorge Abbott, este por omisión, porque supo de estos hechos, no actuó y no hizo nada al respecto. En este caso no se hizo una investigación, no se persiguió a los responsables, es decir, se les dejó en la más absoluta impunidad-, dijo Leal en conversación con este medio.