«Una política de engaño»: Duras críticas a salmonera tras denuncia de manipulación en cifras de peces muertos

Una investigación periodística publicada este jueves por El Mostrador revela que en la empresa salmonera noruega Nova Austral existe una doble contabilidad de mortalidad de salmones. A partir de correos internos dados a conocer, el medio sostiene que una es aquella que se declara ante el Sistema de Información para la fiscalización de la Acuicultura (SIFA) y otra es la que diariamente ocurre en sus centros de cultivo, ubicados estos al interior del Parque Nacional Alberto de Agostini, en la Región de Magallanes y la Antártica Chilena. En consecuencia, el diario electrónico postula que la compañía ha manipulado y acomodado las cifras de mortandad de estos peces.

Ante esto, el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura comenzó una investigación para determinar la veracidad de la grave denuncia respecto de la adulteración de las cifras de mortalidades. Junto con ello, añadieron que de ser ciertas las acusaciones, Nova Austral infringiría ampliamente la normativa sanitaria establecida para la operación de los centros de cultivo en la salmonicultura.

Marcela Lara, subdirectora de Acuicultura, informó que el Servicio activó una revisión inmediata de los antecedentes y que requerirá a la empresa complementar la información y determinar eventuales responsabilidades. Asimismo, sostuvo que se realizará una auditoría en relación a las mortalidades reportadas.

Según la normativa vigente, las empresas tienen la obligación de declarar sus mortalidades de acuerdo a lo que establece el Programa General de Mortalidades; el Reglamento Sanitario para la Acuicultura (RESA) y la Ley General de Pesca Acuicultura, medida que se implementó como una estrategia de detección temprana de brotes de enfermedades post crisis del virus ISA.

«Nova Austral ha mentido a las autoridades»

Por su parte, Greenpeace -que ha denunciado anteriormente un actuar ilegal de Nova Austral- calificó la información conocida esta jornada como «de la máxima gravedad». «La empresa no solo ha obtenido beneficios fiscales superiores a los 80 millones de dólares en los últimos años, sino que ahora sabemos por correos internos que existe una política de engaño respecto de las cifras de mortandad en sus jaulas de la Región de Magallanes», sostuvo al respecto Mauricio Ceballos, vocero del área de océanos de la ONG ambientalista.

En este sentido, Ceballos explicó que «hay que entender que las cifras de mortandad son claves para el negocio salmonero, ya que las empresas no pueden tener más de 15% de muertes de sus peces. Si pasan ese umbral, reciben sanciones y restricciones sobre el cultivo de peces».

Para la organización hay dos grandes interrogantes que surgen tras el reportaje: primero, saber la manera en que han engañado de manera sistemática a las autoridades, y segundo, conocer qué han hecho con los salmones muertos que no han declarado.

«Esta es la misma empresa que exhibe como logro no usar antibióticos y que ahora busca instalarse en el Beagle. Con este reportaje, sin embargo, se derrumba esta ilusión del salmón sustentable. Lo cierto es que Nova Austral ha manejado datos claves a su antojo y ha mentido a las autoridades», apunta Ceballos.

Por otra parte, el vocero de Greenpeace advierte que «tampoco sabemos si se trata de una práctica extendida en otras compañías con tal de mantener y extender sus operaciones», ante lo que sostiene que «se requiere una investigación profunda por parte del Gobierno».

Por último, Greenpeace señaló que Nova Austral se encuentra en un procedimiento sancionatorio por parte de la Superintendencia de Medio Ambiente por incumplimientos en los permisos que poseen para operar en el Parque Nacional Alberto de Agostini.