Una vergonzosa situación protagonizó el alcalde de Antofagasta, Jonathan Velásquez (IND), en el Concejo Municipal.
El jefe comunal sencillamente no quiso escuchar a una dirigenta del gremio docente que iba a leer una carta con sus demandas -están en paro indefinido- ante lo ocurrido con la profesora Katherine Yoma, quien se suicidó luego de ser acosada por una alumna y golpeada por un apoderado, sin que sus superiores la protegieran.
Así, después de argumentar que tenía hambre porque no había almorzado, y que unas personas lo estaban esperando «afuera de su oficina», Jonathan Velásquez simplemente se paró y se fue.
Según consignó el Diario de Antofagasta, ante la salida del alcalde, los concejales decidieron continuar con las exposiciones y autorizaron que la dirigenta diera lectura a la carta, en la cual se reiteraron las demandas de los docentes, partiendo por la renuncia de todas las autoridades de la Escuela José Papic, la Corporación Municipal de Desarrollo Social (CMDS) y su presidente, el alcalde Velásquez, por no apoyar a la docente y más encima, reducir sus horas de clases y su sueldo.
También «la dirigenta sindical acusó que Velásquez tuvo una actitud intimidatoria con ella y que sentaron a su lado un guardia durante toda la sesión», agrega el reporte del citado medio regional.
Posteriormente, hacia el final de la intervención de la representante gremial, el alcalde volvió sorpresivamente a la sesión del Concejo y no encontró nada mejor que expulsar a la dirigenta «porque él no le había dado la palabra», causando el rechazo de los concejales presentes.
¿Y qué hizo el alcalde ante esto? Se paró y se fue nuevamente.
Mira el vergonzoso momento a continuación:
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