La mayoría de las galaxias tienen al centro un agujero negro supermasivo (SMBH es la sigla que se usa en inglés). Algunos de ellos son muy activos, engullen materia y expulsan fuertes chorros de plasma, mientras otros son más apacibles, como Sagitario A*, el SMBH que está al centro de nuestra Vía Láctea.
El mes pasado, el sitio IFLScience reportó la primera observación de un SMBH «inactivo» que se volvía a encender después de tragarse a una estrella. Ahora, un equipo de astrónomos de la Universidad John Hopkins en Baltimore, Maryland, EE.UU., pudo seguir la evolución de este evento en gran detalle. El nuevo estudio pudo confirmar el anterior y expandir el conocimiento acerca de cómo es el estallido de la disrupción de una marea galáctica. La disrupción de una marea galáctica es lo que se espera que ocurra cuando una estrella se acerca demasiado a un agujero negro y éste la hace trizas por su enorme gravedad.
El evento fue llamado ASASSN-14li por los astrónomos y fue observado a través de diferentes telescopios, intentado determinar cómo se producen las disrupciones de mareas galácticas cuando los agujeros negros destruyen estrellas. El agujero negro se come a la estrella y emite chorros de plasma. De acuerdo al estudio publicado en Science, los chorros provocados por el estallido de la disrupción de la marea galáctica, deberían ser emitidos por ambos, los agujeros negros de tamaño estelar y los supermasivos, y la razón por la que no los hemos detectado en los agujeros negros de nuestra galaxia, es sólo porque los instrumentos usados no son lo suficientemente sensibles.
«Estos eventos son extremadamente inusuales», señala Sjoert van Velzen, autor y director del estudio. «Es la primera vez que vemos todo, desde la destrucción de la estrella al lanzamiento de un flujo cónico, también llamado chorro (jet), y lo vimos desplegarse durante varios meses».
Los chorros también se pueden formar cuando una masa de material turbulenta (llamada disco de acrecimiento) está al rededor de los agujeros negros, por lo que los astrónomos tuvieron que asegurarse de que el evento era realmente una estrella siendo destruida por el SMBH.
«La destrucción de una estrella, por un agujero negro, es algo que está lejos de ser comprendido, algo bellamente complicado», agrega van Velzen. «Desde nuestras observaciones, entendemos que las corrientes de escombros estelares se pueden confluir en un chorro rápidamente, lo que es una información valiosa para construir una teoría completa de estos acontecimientos».
Además de van Velzen y sus colegas en Maryland, otro equipo de astrónomos, de la Universidad de Harvard, ha estado buscando señales del ASASSN-14li con radiotelescopios en Nuevo México.
La NASA creó una animación de un agujero negro tragándose una estrella y puedes verlo aquí.
CCV
Fuente IFLScience