Un grupo de astrónomos afirma haber encontrado enormes estructuras invisibles al acecho en la Vía Láctea, lo bastante grandes como para compararlas con el tamaño de la órbita de Tierra al rededor del Sol. Los expertos dicen que podrían ayudar a entender dónde ha ido a parar una gran cantidad de materia desaparecida.
Los investigadores descubrieron las estructuras mientras trabajaban en el telescopio Compact Array, en la organización de investigación científica CSIRO, en Australia. Aunque en otras investigaciones se había vislumbrado su existencia antes, este nuevo informe, publicado en Science, ayuda a tener una idea más acotada de su forma y tamaño.
No se trata de objetos sólidos, sino que aparecen como grandes aglomeraciones de cierto tipo de materiales, posiblemente nubes. O tal vez es gas frío entremedio del delgado gas que hay entre las estrellas, y por eso toma formas extrañas. Los astrónomos describen estas formas como si tuvieran material por fuera y un centro hueco. Algunas incluso podrían ser como una hoja y lo que ven los científicos es el borde.
Todavía es un misterio de dónde vienen, cuán antiguas son estas estructuras o cuántas hay en nuestra galaxia. «En esta etapa aún es un trabajo de especulación», dice Keith Bannister, autor y líder de la investigación a IFLScience. «Puede que haya cientos de ellas en la galaxia», señala.
Las estructuras fueron descubiertas porque los investigadores vieron un «efecto de lente» en galaxias distantes. En particular, el descubrimiento de una se debió a que provocó la refracción de la luz proveniente del cuásar PKS 1939–315, en junio de 2014. La luz se distorsiona al pasar a través de estas estructuras en su camino hacia la Tierra, especialmente en la banda de radiofrecuencia.
Traducción, CCV, El Ciudadano.
Fuente: IFLScience.