Científicos chilenos descubrieron dos nuevos exoplanetas del tipo «Júpiter caliente», enormes bolas de gas similares al coloso del Sistema Solar, orbitando a dos estrellas distintas, K2-237 y K2-238, similares al Sol.
Los objetos están a casi 1500 años luz de la Tierra, en las constelaciones de Ofiuco y Acuario, y tienen una masa levemente superior a Júpiter. El primer planeta (K2-237 b) orbita alrededor de su estrella cada dos días, mientras que el segundo (K2-238 b) realiza su órbita durante tres días.
“Se estima que ambos planetas están compuestos principalmente de Hidrógeno y Helio, pero hay un detalle: K2-237 b es un planeta inflado, es decir, su tamaño es mucho mayor a lo que indican los modelos teóricos, siendo un planeta muy interesante para estudios atmosféricos”, dice Maritza Soto, Doctora en Astronomía de la Universidad de Chile y actual investigadora postdoctoral de la Universidad de Londres Queen Mary.
Para detectar estos planetas se utilizaron distintos instrumentos espaciales instalados en Chile, entre los que están la sonda espacial Kepler 2, los datos de los instrumentos Coralie (en el telescopio suizo de 1.2 metros), FEROS (en el telescopio de 2.2 metros) y HARPS (en el telescopio de 3.6 metros), todos estos últimos emplazados en el Observatorio La Silla de la ESO.
Gaseosos e inflados
James Jenkins, académico del Departamento de Astronomía FCFM U. de Chile e investigador del Centro Excelencia en Astrofísica CATA, explica que “los planetas gigantes como Júpiter deberían tener una masa similar, tal como indican los modelos, pero un grupo de ellos tienen una masa mucho mayor, lo que se denomina inflación». La astronomía plantea que la inflación se produce por el calor que emite su estrella, el que penetra profundamente en el interior del planeta, aumentando su tamaño como un globo inflado.
La Doctora Soto -quien lideró la investigación- agrega que el principal aporte de la investigación es que “entrega evidencia para el estudio de la inflación de planetas, el cual es un fenómeno que se ve en muchos planetas «Júpiter calientes», pero que aún no logramos comprender del todo”. Los datos recibidos de K2-237 b concuerdan con la teoría de que la inflación se produce por la gran cantidad de radiación que reciben estos planetas.
El siguiente paso en esta línea de investigación será estudiar la atmósfera del planeta K2-237 b. “Eso no va a ser inmediato, pero esperamos que se obtengan datos para ese fin dentro de poco», concluye la astrónoma.
Entre los científicos que participaron en la investigación, están Maritza Soto, primera autora del paper y quien estuvo a cargo recopilar todos los datos y análisis, e interpretar los resultados obtenidos, además de calcular algunos de los parámetros de las estrella; James Jenkins, académico del Departamento de Astronomía FCFM de la Universidad de Chile y Andrés Jordan, académico del Instituto de Astrofísica UC. Los dos últimos también son investigadores del Centro de Astrofísica CATA.
Este descubrimiento fue dado a conocer en última edición de la revista Monthly Notices of the Royal Astronomical Society, titulado «K2-237 b and K2-238 b: discovery and characterization of two new transiting hot Jupiters from K2» (“K2-237 b y K2-238 b: descubrimiento y caracterización de dos nuevos Júpiter calientes en tránsito de K2”).
El Ciudadano, vía Centro CATA