Esta es una historia de cómo la perseverancia llevó a dos buscadores de metales aficionados a encontrar oro en un campo de Staffordshire, Reino Unido. Pero no se trata de cualquier oro, sino de piezas de joyería más antiguas que se conozca hasta ahora en el territorio británico.
Los «Torques de Leekfrith de la Edad del Hierro», como se le llama al hallazgo, consisten en tres collares decorativos de oro y un brazalete que probablemente venían del continente; tal vez de Alemania o Francia.
«Este descubrimiento único tiene una importancia internacional», dice la doctora Julia Farley, curadora de las Colecciones Británicas y Europeas de la Edad del Hierro del Museo Británico. «Datan de alrededor del 400-250 a.C, y probablemente es el descubrimiento en oro más antiguo de esta Edad en Gran Bretaña.
«Los collares probablemente los usaron mujeres con poder y riqueza, tal vez personas del continente que se habían casado en la comunidad local. Al entender cómo estos objetos llegaron a ser enterrados cuidadosamente en un campo de Staffordshire, tendremos una invaluable comprensión sobre la vida en la Edad de Hierro en Bretaña», agrega Farley.
El tesoro fue encontrado por dos hombres del área, Mark Hambleton y Joe Kania, en diciembre del año pasado. Ellos encontraron las piezas de joyería dispersas y justo debajo de la superficie del suelo de cultivo, en un predio a unos 80 kilómetros del famoso sitio anglosajón «Staffordshire hoard», hallado en 2009, el que incluye casi 4 mil objetos de metales preciosos avaluados en alrededor de 3,2 millones de libras o 3,9 millones de dólares.
El hallazgo ha sido declarado oficialmente un tesoro. Bajo el Acta de Tesoros del Reino Unido, ahora es propiedad de la Corona británica y cualquier ingreso asociado a él será repartido entre los amigos descubridores y los dueños del terreno en que fue encontrado.
Fuente, IFLS
El Ciudadano