Una capa de roca fundida bajo la superficie terrestre fue identificada por científicos de la Universidad de Texas que podría contribuir a la comprensión sobre el movimiento de las placas tectónicas.
El Instituto de Geofísica del recinto académico informó que investigadores habían identificado previamente parches fundidos a una profundidad similar. Sin embargo, un estudio de la Universidad de Texas en Austin reveló por primera vez esta capa de extensión global, así como su integración a las placas tectónicas.
Esta capa de roca fundida se ubica a unos 160 kilómetros de profundidad desde la superficie de la Tierra, en el área identificada como astenósfera.
«La astenósfera es importante para las placas tectónicas debido a que forma una contención relativamente suave que permite a las placas tectónicas moverse a través del manto», expuso el espacio académico.
Las causas de esta suavidad todavía no están totalmente comprendidas por la ciencia y era tradicionalmente vinculada a la roca fundida. Sin embargo, el estudio del Instituto de Geofísica estimó que estos elementos no generan una influencia notable en el flujo de las rocas del manto.
«Cuando pensamos en algo derretido, intuitivamente estimamos que lo fundido debe cumplir un rol importante en la viscosidad del material. Sin embargo, lo que hemos encontrado es que incluso a pesar de que la fracción fundida es considerablemente alta, su efecto en el flujo del manto es muy menor», apuntó el titular de la investigación, el científico Junlin Hua, asociado posdoctoral a la Escuela Jackson de Geociencias de la Universidad de Texas.
La movilidad de las placas está relacionada de manera prevaleciente al encuentro entre el calor y la roca en el manto terrestre, señala la investigación.
«No obstante que el interior de la Tierra es mayormente sólido, luego de largos periodos de tiempo las rocas pueden cambiar y fluir como miel», apuntó el recinto académico.
El profesor Thorsten Becker, coautor de la investigación, explicó que identificar que la capa de roca fundida no es determinante en el movimiento tectónico permitirá desarrollar modelos computacionales de variación de la Tierra menos imprecisos.
Entender las propiedades de la astenósfera en su origen y las razones de su debilidad es fundamental para la comprensión de las placas tectónicas, agregó la sismóloga Karen Fischer, otra coautora del trabajo.
El trabajo científico fue publicado el 6 de febrero en Nature Geoscience, revista científica, y divulgado por la oficina de prensa de la universidad texana.
Fuente Sputnik