Este viernes, 27 de julio, tiene lugar un eclipse de Luna que algunos califican como el eclipse lunar del siglo, ya que será el más largo de este siglo XXI.
El fenómeno se prolongará durante casi cuatro horas, de las cuales una hora y 43 minutos será de fase total, es decir, nuestro satélite se oscurecerá por completo. Sin embargo, no desaparecerá del todo sino que, iluminada por la luz solar que pasa a través de la atmósfera de la Tierra, se verá teñida de rojo denominada como Luna de sangre.
A diferencia de los eclipses solares, en los que hace falta herramientas para visualizarlo, en la ocultación transitoria de Luna no es necesario ningún instrumento para mirar al cielo; de preferencia unos binoculares, para detallarlo.
Será especial, porque tiene conjunción con el planeta Marte. Es Luna de sangre, por lo que la veremos de color marrón-rojo. Este fenómeno sucede cuando la Tierra se interpone entre la luna y el sol, haciendo que la atmósfera haga de filtro cromático para los rayos solares reflejados en nuestro satélite.
El eclipse de luna roja, podrá ser visto desde Europa, África, Asia, Australia y Nueva Zelanda. En España, empieza antes de que salga la Luna. Solo desde las Islas Baleares y la mitad oriental de la Península, podrá ser posible observarla antes del inicio de la fase total. En el resto, emergerá totalmente eclipsada.
Aunque cada 29 días existe satélite en fase llena, no ocurre una ocultación todos los meses, debido a que la órbita lunar está desviada unos 5 grados respecto a la órbita de la Tierra en torno al Sol. Así que solamente cada dos años se suele producir el alineamiento adecuado para dar lugar a un eclipse lunar.
El eclipse siguiente total será en de 2019. Será de tipo lunar, considerado el más largo del siglo XXI, con una duración total de 1 hora, 42 minutos y 57 segundos.
Un eclipse lunar es un evento astronómico que sucede cuando la Tierra se interpone entre el Sol y la Luna, generando un cono de sombra que oscurece a la Luna.
Para que suceda un eclipse, los 3 cuerpos celestes, la Tierra, el Sol y la Luna, deben estar exactamente alineados o muy cerca de estarlo, de tal modo que el globo terráqueo bloquee los rayos solares que llegan al satélite; por eso, los eclipses lunares solo pueden ocurrir en la fase de luna llena.