La contaminación del agua potable es un grave problema de salud pública. Puede causar enfermedades que pueden llegar a ser mortales, como ocurre en muchas de las zonas más pobres del mundo.
El cloro y otros agentes pueden ayudar en la desinfección, pero además de ser potencialmente dañinos, no son muy efectivos cuando hay bacterias y otros microorganismos que son muy resistentes.
Un nuevo estudio describe el desarrollo de pequeños robots que pueden sumergirse y desplazarse por el agua, limpiando las bacterias que hay en ella, informa el medio NCYT.
Se trata de partículas esféricas con dos hemisferios de diferentes materiales: uno de magnesio, que reacciona con el agua para producir burbujas de hidrógeno que propulsan a los mismos microbots, y otro formado por capas alternas de hierro y oro y cubiertas por nanopartículas de plata.
¿Cómo funciona? El oro atrae a las bacterias del agua, las que se adhieren a él para luego ser eliminadas por las nanopartículas de plata.
El trabajo fue publicado en la revista ACS Applied Materials & Interfaces y estuvo dirigido por la investigadora Diana Vilela, del grupo Smart Nano-Bio-Devices del IBEC en Catalunya, España.
«Nuestros ensayos en el laboratorio muestran que los microbots pueden navegar a través del agua durante unos 15 a 20 minutos antes de quedarse sin magnesio y, en este tiempo, son capaces de atrapar más del 80% de las bacterias E. coli en agua con una alta concentración de ellas», explica Samuel Sánchez, profesor en ICREA y responsable de Smart Nano-Bio-Devices, citado en NCYT.
«Después, debido a las propiedades magnéticas del hierro, los microbots pueden ser recogidos facilmente con un imán, sin dejar ningún residuo en el agua», agrega Sánchez.
Los investigadores recibieron el financiamiento de la Fundación Alexander von Humboldt en Alemania, el Consejo Europeo de Investigación y el Instituto Max Planck, también de Alemania.