Las imágenes obtenidas por el observatorio espacial Planck de la Agencia Espacial Europea reflejan una señal polarizada de 353 GHz. Los colores representan la emisión térmica, mientras que el relieve es un reflejo del campo magnético de la Vía Láctea.
Planck ha observado el cielo capturando ondas milimétricas con instrumental de alta frecuencia durante 1.500 días, pasando asimismo cerca de 1.000 días analizando el dominio submilimétrico, explica el sitio oficial del proyecto.
«El cielo inaccesible al ojo humano por fin será reflejado», explica el sitio del observatorio Planck.
Las imágenes del campo magnético de la Vía Láctea conforman el «mapa definitivo» de la radiación espacial, que además refleja la interacción entre la radiación del fondo de microondas y los electrones en grupos y conjuntos de galaxias.
via RT