Estamos acostumbrados a escuchar acerca del cristal líquido en televisores y pantallas de celulares, sin embargo ahora, con una nueva investigación se espera poder aplicar la misma tecnología en la optometría, para llegar a corregir la visión borrosa.
El avance fue desarrollado por Devesh Mistry, un estudiante de postgrado en física de la Universidad de Leeds. Mistry cree que el cristal líquido se puede usar para desarrollar un lente que puede enfocar la luz en respuesta al movimiento del ojo.
«A medida que envejecemos, el lente (cristalino) de nuestro ojo se rigidiza. Cuando los músculos del ojo se contraen, ya no pueden dar forma al cristalino para enfocar objetos cercanos», señaló Mistry en una declaración. Con el cristal líquido, «el cristalino se ajustaría y enfocaría automáticamente, dependiendo del movimiento del músculo ocular».
Estos lentes podrían implantarse dentro del ojo, muy parecido a como se hace en la operación de cataratas, donde un cristalino borroso es reemplazado por uno artificial, en una operación de 10 minutos bajo anestesia local.
«Los cristales líquidos son una fase de la materia muy subvalorada», explicó el investigador al periódico The Times. Los cristales líquidos están entre los líquidos y los sólidos cristalinos. «Tienen una estructura ordenada como el cristal, pero también pueden fluir como un líquido y responder a estímulos«, agregó
La meta de Mistry es tener un prototipo completamente listo para la finalización de su doctorado en 2018. El proyecto se lleva a cabo en colaboración con Eurolens Research de la Universidad de Manchester y la fábrica que hace el lente de contacto es UltraVision CLPL.
Los científicos esperan que dentro de una década, estos nuevos lentes ya se puedan implantar en los ojos.
Crédito: IFLScience