Los monos de Campbell (Cercopithecus campbelli campbelli) son unos pequeños primates que miden entre 35 y 55 centímetros de altura y que viven en pequeños grupos compuestos por unos diez individuos. Esta especie de primates ha sido estudiada por diferentes investigaciones científicas debido a la complejidad de sus comunicaciones, en las que se pueden diferenciar diferentes avisos de alarma dependiendo del lugar en el que habiten y los peligros que los acechen.
En el año 2010 se publicaron los resultados de un estudio llevado a cabo por científicos del Grupo de Investigación en Etología Animal y Humana de la Universidad de Rennes, en Francia. Los resultados determinaron que los monos de Campbell emitían seis tipos de llamadas de alerta que combinaban con vocales largas que les permitiían transmitir mensajes sobre diferentes peligros. Se trataba del ejemplo más complejo de protosintaxis descubierto en una especie no humana.
Recientemente, otros estudio, ha analizado la diferenciación de los sonidos generados por estos primates ante ciertas situaciones de peligro, los cuales difieren dependiendo del depredador y de la intensidad del peligro. Para ello se han comparado las palabras -por nombrarlas de alguna forma- emitidas por los monos que habitan en el Bosque de Tai, en Costa de Marfil donde los principales depredadores son las águilas y los leopardos; y las palabras emitidas por los monos Campbell que viven en la Isla de Tiwai, en Sierra Leona, área en la que los primates son amenazados por las águilas.
El estudio llevado a cabo por el equipo de Philippe Schlenker, investigador del Instituto Jean-Nicod, ha determinado que estos animales inteligentes hacen uso de dos protodialectos diferentes de un mismo protoidioma. La investigación ha constatado que estos monos mantienen una distinción entre raíces y sufijos en los sonidos que emiten, y que, combinándolos, son capaces de describir la naturaleza de un peligro y su intensidad.
Analizando los sonidos emitidos por los monos de Costa de Marfil y los de Sierra Leona, los investigadores encontraron que las palabras emitidas los animales hacían distinción entre raíces -como ‘hok’ o ‘krak’- y sufijos -como ‘oo’- y que mediante su combinación los monos describían los peligros que les acechaban. Así, por ejemplo, ‘hok’ avisa de amenazas aéreas graves -como ágilas u otros depredadores voladores- mientras que ‘hok-oo’ se usa para alteraciones aéreas en general, ya que el sufijo ‘oo’ es usado por los monos Campbell como atenuador.
Comparando ambos grupos de monos, los investigadores detectaron que las palabras no se usan de la misma forma en el Bosque de Tai que en la Isla de Tiwai. En Tai, por ejemplo, ‘krak’ funciona como aviso de la presencia de leopardos, mientras que en Tiwai, como los leopardos no son una amenaza, ‘krak’ se usa como aviso genérico de alerta.