El Sol está pasando por un periódo inestable, en el que cae luego de ciclos de 11 años. El Observatorio Solar y Heliosférico (SOHO) detectó una mancha solar que entró en erupción el martes y arrojó un filamento de masa coronal hacia la Tierra la que podría golpear nuestra ionosfera. La NASA clasifica la eyección, que se produjo 24 horas después de una tormenta solar, en el grupo de las más poderosas las de tipos X, siendo esta una X2.1 , y los investigadores trabajan ahora en tomarle la medida a la erupción, que podría dirigirse a la Tierra y provocar algunos Radio Blackouts.
Las erupciones solares se clasifican en tres tipos según su intensidad (X, las más poderosas; M, resistencia media, y C, las más débiles), y la NASA ha clasificado esta erupción como de clase X-2.1.
Las eyecciones son enormes nubes de plasma solar que viajan por el espacio y alcanzan los 5.000.000 de kilómetros por hora. Si estas nubes llegaran a la Tierra, podrían causar estragos en el planeta y provocar alteraciones en las señales de GPS y las comunicaciones de radio y redes de energía, alerta la NASA.
La llamarada solar se produce 24 horas después de una tormenta solar que tuvo lugar el lunes y que alcanzó una intensidad de M-5. Al ser menor la intensidad de la explosión, la eyección viajó a menos de 1,2 millones de kilómetros por hora, por lo que, aunque golpeara el campo magnético de la Tierra, «no hubiera causado mucho daño», según la agencia espacial estadounidense.
Así, el mes pasado el sol «dejó escapar» una llamarada solar X-6,9, que fue la tormenta solar más potente desde diciembre de 2006. Esa tormenta, que estalló el pasado 9 de agosto, también generó eyecciones de masa coronal, pero no en dirección a la Tierra.
La Opinión Coruña / El Ciudadano
Foto: Nasa